Caixa Terrassa ultima su fusión tras ganar 35,8 millones, un 27,6% menos
Caixa Terrassa, que a mediados de año se fusionará con las cajas de Sabadell, Girona y Manlleu, integración que "cumple con todos los requisitos de Bruselas", ganó el pasado año 35,8 millones de euros, un 27,6% menos, tras destinar 113,4 millones a provisiones para insolvencias.
El director general de Caixa Terrassa, Enric Mata, que será también el máximo directivo de Unnim, la entidad resultante de la fusión de las cuatro cajas comarcales, ha explicado hoy que estas dotaciones se han realizado con cargo a la cuenta de resultados y que se mantienen "intactas" las provisiones genéricas, que suman 116 millones de euros.
El índice de morosidad de Caixa Terrassa era a 31 de diciembre de 2009 del 5,95% del total de la inversión crediticia, ligeramente inferior al promedio de las demás cajas, en tanto que la morosidad sobre los activos de riesgo se situaba en el 4,69%.
Enric Mata prevé que la morosidad sobre la inversión crediticia pueda llegar este ejercicio al 7 o 7,5%. "Será el año que registre la punta más alta de morosidad", ha apostillado.
Los márgenes de la caja vallesana han crecido en el último año de forma general, especialmente el bruto, que ha superado los 257 millones, un 24% más, y el de explotación, que ha aumentado un 66,4%, hasta los 128,3 millones.
La entidad mantiene asimismo una elevada liquidez, según ha destacado su director general, con un volumen de activos líquidos de 1.171 millones, lo que representa más de un 9% del total de balance y un nivel "privilegiado" en el sector.
Por su parte, la inversión crediticia de Caixa Terrassa se ha situado en 8.844 millones de euros, un 2% menos, como consecuencia de la caída de la demanda de crédito y de la crisis económica.
En cuanto al conjunto de depósitos administrados, el saldo al finalizar el ejercicio ha sido de 11.336 millones, un 6% más.
En 2009, además, la entidad de ahorro se ha adjudicado unos 1.600 inmuebles, repartidos a partes iguales entre viviendas y aparcamientos, de los que ha logrado comercializar, a través de la venta o el alquiler, unos 750.
Mata ha remarcado, en este sentido, que se está produciendo "un mayor movimiento en el mercado inmobiliario" tras experimentar un recorte de los precios de un 25% de promedio.
"Creemos que empieza a ser un momento apropiado para empezar a adquirir viviendas", ha subrayado.
El director general de Caixa Terrassa se ha referido también al proceso de fusión que iniciaron el pasado año con las cajas de Sabadell, Manlleu y Girona y que, según el calendario con el que se trabaja actualmente, podría culminar a mediados de junio.
Según ha dicho, el Banco de España ha presentado este plan de integración a consulta de la Comisión Europea (CE), que ha concluido que "cumple con todos los requerimientos de Bruselas".
La CE, no obstante, ha pedido información complementaria a las cajas, como por ejemplo un informe de evaluación sobre la idoneidad de los directivos que asuman los primeros niveles de responsabilidad de la nueva caja Unnim o algunos "aclaramientos" de tipo contable.
"Pero no se ha cambiado ninguna de las cifras relevantes del plan de integración", ha señalado el director general de la caja egarense.
Ahora, los consejos de administración de las cajas deberán aprobar el plan de integración con las últimas modificaciones y remitirlo, a su vez, a las respectivas asambleas extraordinarias, que tendrán que dar el visto nuevo definitivo al plan de fusión.
Enric Mata cree que a mediados de marzo los consejos de administración podrían aprobar los planes actualizados y que a finales de abril o principios de mayo se celebrarán las asambleas extraordinarias. De esta manera, Unnim "podría empezar a operar en los mercados a mediados de junio".
Resultados
Caixa Terrassa obtuvo un beneficio neto de 35,8 millones de euros en 2009, un 27,6% menos que el año anterior -cuando ganó 49,5 millones-, tras destinar 113,4 millones a dotaciones, informó la caja de ahorros. El director general de la entidad, Enric Mata, destacó que no se ha hecho uso de las provisiones genéricas pese al contexto de crisis y aumento de la morosidad.
El pasado año, el margen de intereses creció un 16,2% (hasta 146,6 millones), el margen básico un 8% (hasta 201,4 millones), y el margen bruto un 23,9% (hasta 257 millones). El margen de explotación antes de dotaciones fue de 128,3 millones, un 66,4% superior al de 2008.
Los depósitos administrados crecieron un 6%, hasta los 11.336 millones, mientras que la inversión crediticia cayó un 2,1%, hasta los 8.844,4 millones. El crédito a empresas sumó 42,3 millones, más del doble que en 2008, cuando fue de 17,6 millones.
La morosidad se situó en el 5,95% -frente al 3,02% de 2008-, la tasa de cobertura en el 50% (138% considerando las garantías hipotecarias), y el 'core capital' de la entidad en el 6,06%. La caja presidida por Jaume Ribera cerró el año con una liquidez de 1.171 millones, lo que supone un 9,1% del total del balance.
Con esta evolución, la caja ha decidido destinar 27,8 millones del resultado a reservas generales, y ocho millones a la Obra Social para 2010, frente a los 10 millones de 2009 (de los que finalmente de ejecutaron 7,6). El objetivo principal será el campo asistencial.
Inmuebles por 310 millones
En 2009, Caixa Terrassa sumaba 2.335 inmuebles procedentes de adjudicaciones y daciones por un valor de 310 millones -frente a los activos por 150 millones de 2008-, de los que logró comercializar -vendiendo o alquilando- 733 (495 viviendas y 238 plazas de aparcamiento) por 135 millones.
A 31 de diciembre, la cartera de inmuebles de la caja para su venta o alquiler era de 1.602 por un valor de 175 millones: 690 viviendas por 170 millones y 912 aparcamientos por cinco millones de euros.
"Empieza a haber más actividad en el mercado inmobiliario", señaló Mata. La entidad otorgó préstamos para vivienda protegida por 30 millones en 2009, y prevé destinar otros 25 millones en breve para edificar 230 viviendas.
Para 2010, Mata auguró un ajuste en los resultados del 25% respecto a 2009, y que la morosidad puede alcanzar entre el 7 y el 7,5%, como año que "recogerá la punta de morosidad más alta" en el marco de la recesión económica. Tras conocerse ayer la equiparación de las tasas de morosidad entre bancos y cajas, no vio "diferencias remarcables" entre la evolución de impagos a medio plazo que tendrán bancos y cajas.
Respecto a las retribuciones de los directivos de Caixa Terrassa, se congelaron en 2008, y ahora se han revisado con un aumento del 1%, expuso, en un contexto de austeridad pero intentando incentivar la labor de dirección.