El presidente de Deloitte apuesta por la innovación para competir
Cree que las empresas españolas ya no pueden rivalizar en costes
La competitividad española a largo plazo depende de que seamos capaces de generar consistentemente ganancias de productividad. En España, dado nuestro nivel de renta, no podemos conseguir esas ganancias a partir de los costes. Sólo se puede hacer a partir de la innovación". Esas fueron algunas de las reflexiones desgranadas ayer por el presidente de Deloitte en España, Fernando Ruiz, durante su participación en los Desayunos Esade, que organiza la escuela de negocios con el patrocinio de Criteria Caixa Corp. y la colaboración de CincoDías.
El presidente de Deloitte, que durante su conferencia titulada El reto de la competitividad a través del talento, mostró su convencimiento de que este año será el de la recuperación, si bien, "tímida y lenta", aseguró que España tiene un problema con la innovación. "Si comparamos la posición que ocupamos dentro de la UE en términos de PIB con la que ocupamos en número de empresas innovadoras, vemos que existe todavía un desequilibrio entre nuestra riqueza y la capacidad de innovar", señaló.
El presidente de Deloitte explicó que la inversión y las subvenciones y ayudas de la Administración son necesarias "y siempre pocas para fomentar la innovación". Pero reconoció que para diferenciarnos en el mercado mediante la generación de productos y servicios competitivos es importante que las empresas "revolucionen su forma de pensar", ya que "la inversión en innovación es la condición necesaria, pero no la suficiente".
Porque, al margen de que en España exista una falta de inversión en innovación, la solución al reto de alcanzar un nivel adecuado pasa, en opinión de Fernando Ruiz, por el desarrollo de actuaciones que estén orientadas a fomentar el talento.
"Hay mucho que hacer, pero lo podemos hacer y hay elementos positivos: España es una economía muy abierta, muy internacionalizada y además tenemos la mejor generación de empresarios de nuestra historia desde la integración en la UE", aseveró.
A pesar de los emprendedores punteros con los que cuenta España, el presidente de la firma de servicios profesionales también citó el ranking de innovación de la Unión Europea. Según éste, España se sitúa en la media, junto con Chipre, Eslovenia, o Estonia, por ejemplo. Eso sí, según Ruiz, la situación ha mejorado algo respecto a 2006, cuando nos encontrábamos aún más alejados de los primeros puestos a los que, en opinión del directivo, deberíamos aspirar a estar ya que España ocupa el quinto puesto dentro de la UE en términos de PIB. "Este poder económico tendría que traducirse en ser uno de los cinco primeros países en innovación. Y no el undécimo, como hasta ahora", añadió.
Empleados con talento
El presidente de Deloitte opinó que ser competitivos no es tan fácil como destinar dinero a la investigación, y como ejemplo de ello apuntó que el 71% de las políticas innovadoras de las empresas procede de sus empleados. "Debemos adaptar nuestras empresas a la innovación", ya que, explicó, en muchos casos las compañías consideran la innovación como un área de las que hay que responsabilizar a un área o a una persona concreta, cuando, en su opinión, debe considerarse como un elemento clave del negocio, "alrededor del cual hay que organizar todos los demás, de forma que al final se consiga una empresa innovadora".
Fernando Ruiz también señaló la importancia de reformar el sistema educativo español, en el que apenas el 10% de los universitarios eligen carreras técnicas, que son precisamente las que tienen una mayor vinculación con la innovación. A esta circunstancia se une la constatación de que el cambio en la pirámide poblacional española reducirá en los próximos años el número de licenciados "y por ello tenemos que estar preparados para una escasez de talento en las universidades".
El presidente de Deloitte señaló además que España debe conseguir ser un país atractivo para investigar. "Debemos evitar la fuga de cerebros y conseguir que se pueda investigar e innovar sin necesidad de cruzar las fronteras", para lo que es necesaria la colaboración de empresas y Universidad. "El talento debe permanecer en España", concluyó.
Fuga de cerebros
EE UU, con 53.147 patentes, según datos de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual de 2007, es el país que lidera el ranking de invenciones.En Europa, es Alemania el país que registra cada año un mayor número de patentes y ocupa el tercer puesto de la clasificación, después de Japón.España se sitúa en la décimo sexta posición. Con 1.290 patentes, se encuentra por debajo de Francia, Reino Unido, China, Holanda, Italia, Canadá o Israel.