En un comunicado, Fontenla indicó que, una vez conocidos los resultados de la 'due diligence', cree que la entidad resultante "se ajustaría al criterio de solvencia requerido por los mercados financieros y de galleguidad expresado por la sociedad".
Al hilo de ello, el líder de la patronal estimó que el informe señala que una integración a través de un SIP -sistema institucional de protección- "mermaría" la galleguidad, pues trasladaría parte de la capacidad de decisión fuera de Galicia, "con las evidentes consecuencias que ello comportaría".
Para Fontenla las ratios de solvencia, rentabilidad y eficiencia apuntan a una entidad "solvente", que "garantizaría la capacidad de atender a sus compromisos con el tejido empresarial gallego", cuya "máxima urgencia" es tener acceso al crédito.
Los costes de reestructuración "serían también favorables" para los intereses gallegos, dado que los económicos -cifrados en 485 en la auditoría- se amortizarían en 2013 y el ajuste de plantilla "se realizaría en su mayoría a través de prejubilaciones".