Unicaja y Cajasur cierran in extremis un acuerdo para su fusión
Las dos cajas andaluzas han negociado toda la tarde para seguir adelante con sus planes de integración y evitar así la amenaza de intervención que pendía sobre la entidad cordobesa.
Los presidentes de Unicaja, Braulio Medel, y Cajasur, el sacerdote Santiago Gómez Sierra, acaban de alcanzar un acuerdo para avanzar en la integración de ambas entidades. Después de una tarde de negociaciones a contrarreloj, con el límite máximo de mañana para llegar a un pacto definitivo, las cúpulas directivas de ambas cajas han llegado a un punto de consenso, y han firmado un plan de negocio.
El Banco de España había amenazado el jueves pasado con intervenir y subastar Cajasur, en caso de que la entidad cordobesa se negase fusionarse con Unicaja. El supervisor bancario, urgido por el deterioro del balance de la entidad, intentaba así evitar que se repitiera lo ocurrido con Caja Castilla La Mancha, que acabó siendo intervenida, a pesar de haber estado muy cerca de cerrar un acuerdo de fusión con la malagueña Unicaja.
El principal escollo en la negociación ha sido el referido a los recortes de plantilla que exigirá la integración. Cajasur ha tratado de evitar, en todo momento, que el mayor coste laboral recayera sobre sus espaldas. En concreto, en un estudio elaborado por la consultora Boston Consulting Group se aseguraba que la caja debía recortar 1.000 puestos de trabajo.
Diversos políticos andaluces, desde el secretario general del Partido Popular en Andalucía, Javier Arenas, hasta la antigua alcaldesa de Córdoba, Rosa Aguilar, habían llamado durante la tarde a la responsabilidad de los gestores de ambas entidades, para evitar la intervención y garantizar la estabilidad del sector financiero andaluz.