El regulador cree que las provisiones no son "la panacea"
Las provisiones no son "la panacea" para la banca, por lo que "las autoridades deben centrarse principalmente en la correcta combinación de políticas monetarias y fiscales" para ejercer control sobre el ciclo crediticio, mantiene el director del departamento estabilidad financiera del Banco de España, Jesús Saurina. Explica que las provisiones dinámicas -anticíclicas- son una herramienta para cubrir con adecuada transparencia el riesgo de crédito que se va acumulando en los balances bancarios.
En un artículo de la revista de Estabilidad Financiera del organismo supervisor Saurina afirma que estas provisiones permiten reforzar la solidez de la banca en particular y del sistema financiero en general. Además, mitiga en parte la tendencia a acentuar los ciclos económicos, tanto al alza como a la baja. El autor incide, no obstante, en que las provisiones dinámicas no deben entenderse como un instrumento "alternativo" a la política monetaria. Dice que , aunque pueden incrementar el coste del crédito, la experiencia española demuestra que "no son demasiado eficaces para "domar el ciclo crediticio".
Las provisiones son un mecanismo que ha demostrado ser muy útil para los bancos españoles en la actual crisis, pero no hay garantía alguna de que puedan afrontar la totalidad de las pérdidas de crédito en la próxima crisis, subraya Saurina.
Considera el autor que las provisiones pueden ser especialmente útiles para los países emergentes, al permitir forjar durante los tiempos de bonanza un colchón anticíclico.
Independencia
El presidente del Toronto Leadership Centre, John Palmer, dice en un artículo que los supervisores deberán actuar con más independencia y prudencia para evitar futuras crisis. Estima que, para prevenirlas, las medidas deben ir "mucho más allá" que fortalecer el capital.