Rajoy pide a la banca que saque a la venta pisos "con grandes descuentos"
La falta de dinamismo en el mercado inmobiliario está impidiendo un saneamiento adecuado de las entidades financieras y esto, a su vez, limita el crédito que se concede a las empresas y a las familias. Este es el diagnóstico que ayer hizo el líder del PP, Mariano Rajoy, en las jornadas de The Economist, donde propuso que los bancos que utilicen las ayudas públicas pongan a al venta las viviendas "con grandes descuentos".
Rajoy recordó que se ha multiplicado por cinco, de 88 a 420 días, el tiempo medio de venta de un inmueble y estimó que el sector financiero se hará cargo de unos 100.000 pisos a finales de 2009 y "muchos más" en 2010. Si estas viviendas se pusieran a la venta con estos descuentos, argumentó, "se dinamizaría el mercado, se reducirían los inmuebles sin vender y socialmente se pondría vivienda asequible en el mercado".
El líder del PP pasó de refilón por la reforma del mercado laboral. Sin entrar en detalles, afirmó que su partido propone abordar cuatro áreas de cambios: intermediación, formación, dualidad de los contratos y negociación colectiva.
A su juicio, el Gobierno ha eludido hasta el momento ésta y otras reformas, a pesar de lo cual se muestra optimista sobre la salida de la crisis. "No se puede confundir estancamiento con recuperación", proclamó Rajoy, después de reiterar su ofrecimiento al Ejecutivo de un gran acuerdo nacional para reducir el gasto público que, a su juicio, debería comprometer también a comunidades autónomas, ayuntamientos y agentes sociales.
"El déficit público español es insostenible", sostuvo, y el aumento de la deuda tampoco ha servido para ganar productividad. A este diagnóstico, sumó su inquietud por la absorción de la mayor parte del crédito nuevo por parte de las administraciones públicas, mientras el grifo a empresas y familias continúa cerrado.