Unicaja gana un 20% menos pero mantiene la morosidad bajo control
Unicaja comienza a sentir los rigores de la recesión económica en sus cuentas. La caja malagueña ganó en los nueve primeros meses del año 236 millones de euros, un 20,2% menos que lo obtenido un año atrás. Aunque los márgenes principales mantienen una evolución positiva, las dotaciones por deterioro de activos -que se han disparado un 67,7%- en este periodo, han empañado los resultados.
El margen de intereses, que refleja la diferencia entre lo que la entidad ingresa por prestar dinero y lo que paga por tomarlo prestado, alcanzó los 570 millones (+15,2%). Mientras tanto, el margen de explotación, que también recoge las comisiones cobradas, así como los gastos de administración y las amortizaciones, fue de 532 millones (+12,2%).
Pese a esta buena evolución del negocio bancario, la entidad presidida por Braulio Medel sigue preocupada por la morosidad. Aunque la tasa de impagados está bajo control, con una ratio del 2,9%, cuando la media del sector de cajas ya roza el 5%, la caja mantiene su "habitual política de prudencia", según explicó ayer en un comunicado, y ha incrementado en un 67,7% las provisiones.
Otra de las consecuencias del deterioro económico es que la inversión crediticia en Unicaja se ha estancado, registrando hasta septiembre un tímido incremento del 0,8%. No obstante, la inversión en valores creció en este periodo un 44,1%.
En cuanto al número de oficinas, la caja malagueña mantiene la estrategia de "adaptación" a la coyuntura económica, con el cierre de 15 sucursales a lo largo de 2009. Su red actual es de 904 agencias.