Berlín celebra los 20 años de la caída del Muro
Alemania celebra hoy el veinte aniversario de la caída del Muro de Berlín con una gran "Fiesta de la Libertad" ante la Puerta de Brandeburgo, a la que asistirán numerosos jefes de Estado y gobierno.
El principal foco de atención lo constituirá el derribo de un gran dominó de poliestireno que ha sido colocado a lo largo de un tramo de 1,5 kilómetros por los que discurría el muro.
Las piezas de dominó han sido pintadas por artistas y jóvenes de todo el mundo y se extienden desde la Potsdamer Platz hasta el Reichstag, con la Puerta de Brandeburgo como epicentro.
La fiesta comenzará hacia las 18.00 GMT con un concierto de la Staastkapelle de Berlín que dirigirá Daniel Barenboim. A continuación, los jefes de Estado y gobierno atravesarán simbólicamente la Puerta de Brandeburgo desde el lado oriental hacia el occidental, donde ha sido instalado otro estrado, en el que habrá varios discursos.
Las primeras intervenciones serán de la canciller Angela Merkel y el alcalde-gobernador de Berlín, Klaus Wowereit, a los que seguirán los representantes de las cuatro potencias aliadas que se repartieron Berlín tras la guerra.
Por parte de Rusia y Francia participarán sus respectivos presidentes, Dmitri Medvedev y Nicolas Sarkozy; por parte del Reino Unido asistirá el primer ministro británico, Gordon Brown, y de Estados Unidos llegó ya ayer la secretaria de Estado, Hillary Clinton.
Los festejos contarán también con la presencia de jefes de Estado y Gobierno de los 27 países miembros de la Unión Europea, entre ellos el español Jose Luis Rodríguez Zapatero, que llegará a Berlín junto a su colega polaco, Donald Tusk, tras celebrar una reunión bilateral en el balneario polaco de Sopot.
Finalmente, los invitados a las celebraciones por el aniversario de la caída del Muro de Berlín cenarán en la Cancillería Federal con Merkel y su marido, el científico Joachim Sauer.
Antes y a primeras horas de la tarde, la canciller alemana, acompañada por los Premio Nobel de la Paz Mijail Gorbachov y Lech Walesa, se habrá acercado al antiguo puesto fronterizo interalemán de la Bornholmer Strasse, donde darán un paseo por el antiguo trazado del Muro.
El puesto fronterizo de la Bornholmer Strasse fue el primero en abrir sus barreras la noche del 9 de noviembre de 1989 y por él pasaron a occidente miles de ciudadanos germano orientales ansiosos por conocer una parte de la ciudad, que les había estado vetada durante 28 años.
La propia canciller alemana, que trabajaba entonces como física en Berlín Oriental, cruzó esa noche el muro por ese lugar y, según ha confesado, celebró con cerveza la caída del Muro en casa de unos desconocidos en el sector occidental de la ciudad.