Rajoy amenaza con los estatutos para imponer la paz en el PP
Con su estrategia de dejar hacer, dejar pasar, el líder del PP, Mariano Rajoy, ha llegado a blandir los Estatutos del partido en forma de amenaza. Su objetivo es imponer la paz en el partido al precio que sea. "No habrá próxima vez", advirtió ayer.
El de ayer fue un comité ejecutivo de alto voltaje, de esos que no se recuerdan en el centro derecha desde la etapa de la extinta UCD. Mariano Rajoy recibió el apoyo de los presidentes regionales del PP para actuar con mano dura en el caso de que se produzcan nuevas indisciplinas. El instrumento a aplicar serán los propios estatutos, "Ni una más, no habrá próxima vez", les prometió Rajoy a los suyos en un discurso cuya principal destinataria, la presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, estaba ausente inaugurando una guardería en Majadahonda.
Rajoy inició su intervención recordando por qué optó por continuar en el cargo tras la derrota electoral de 2008, los intentos que hizo para integrar a los dirigentes díscolos y los éxitos electorales cosechados en Galicia y en las europeas. A partir de ahí, reprochó la deslealtad de algunos "militantes", entre los que incluyó, sin nombrarle, al ex ministro Juan Costa, se refirió a las conspiraciones de que ha sido víctima y, finalmente, lanzó algunas advertencias ante el caos reinante en el PP. "La situación es grave, no se puede volver a repetir nunca, es inadmisible que se presione a los órganos del partido, este es un juego muy peligroso No puedo aceptar que nadie diga que no somos capaces de gobernarnos a nosotros mismos y, por tanto, que no podemos gobernar España ", se dolió.
La regañina tuvo como principal destinatario al PP madrileño y, en segundo lugar, al PP valenciano. "No habrá próxima vez, les insistió a ambos", mientras planeó sobre la reunión la amenaza de constituir gestoras allí donde la indisciplina siga reinando. A los que no quisieron darse por enterados, les añadió: "No somos un partido federal, ni mucho menos un reino de taifas ".
Otras posibles consecuencias de la indisciplina también las enumeró Rajoy al subrayar sus propias competencias, que abarcan desde definir la estrategia general del partido hasta elaborar las listas para las elecciones autonómicas y municipales. Y, lo más importante cara al futuro, "velar porque los Estatutos se cumplan".
Aguirre no se presenta y Cobo no se retracta
La presidenta de la comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, plantó ayer a Rajoy y al comité ejecutivo del PP, a quienes respondió a distancia durante la inauguración de una guardería en Majadahonda y, posteriormente, durante un acto en Leganés. La presidenta madrileña afirmó que da la impresión de que "la víctima, que soy yo, se coloca al mismo nivel que el agresor". Está por ver qué sanción le impone hoy al vicealcalde Manuel Cobo el comité nacional de derechos y garantías por la entrevista concedida a El País donde lava en público los trapos sucios del gobierno regional madrileño. El propio Cobo puso ayer sus cargos a disposición del partido y contó ayer a la dirección del PP que llegó a sentir miedo cuando se enteró de que había sido espiado supuestamente por personas próximas a Aguirre.