La Seda firma un crédito de 10 millones con Caixa Geral para su circulante
La Seda de Barcelona firmó ayer un crédito de 10 millones de euros con Caixa Geral, su principal accionista. Parte de esta operación, a devolver en 18 meses, permitirá continuar con la construcción de la planta de PTA (una de las bases para producir plástico PET para embalajes) comprometida con la propia caja en Sines (Portugal).
Sin embargo, lo más importante a corto plazo es que el crédito permitirá "destensar" el circulante de la compañía, según informó ayer la empresa en un comunicado. La Seda afronta en las últimas semanas una serie de paradas de producción en su principal factoría de El Prat (Barcelona), programadas en parte por la caída de la demanda, pero que también reflejan la escasez de materias primas por la reducción de la tesorería. La compañía adeuda las últimas nóminas a la plantilla.
El mismo comunicado cifró en 30 millones las necesidades de financiación de la empresa para afrontar su normal funcionamiento. Además del acuerdo alcanzado con Caixa Geral, la compañía busca fuentes de financiación alternativas por un montante de otros cinco millones. Con todo, la empresa que preside José Luis Morlanes sigue pendiente desde hace meses de un crédito del Instituto Catalán de Finanzas (ICF), organismo dependiente de la Generalitat catalana. Fuentes cercanas al grupo químico denunciaron que la administración catalana aumenta cada día las garantías para aprobar el crédito, esperando un acuerdo global con la banca acreedora.
En este sentido, La Seda ha acordado con parte de las entidades financieras unas condiciones para reestructurar la deuda, que se sitúa en los 600 millones. La banca ha iniciado un proceso de aprobación de las condiciones que concluirá en un plazo de cuatro semanas. Respecto al plan de venta de activos no estratégicos, La seda negocia con cinco posibles compradores interesados en adjudicarse la planta de IQA.