Vivendi obtiene el visto bueno de su consejo para lanzar una contraopa por GVT
Vivendi sigue deshojando la margarita. El grupo francés de medios comunicación está dispuesto a mantener en tensión a GVT, a Telefónica, a los accionistas de ambas compañías y a los suyos propios antes de dar a conocer su decisión sobre si seguir adelante o no con la opa sobre la operadora brasileña.
La firma francesa celebró la semana pasada un consejo de administración en el que, según fuentes cercanas a Vivendi, se optó por seguir estudiando la situación. Oficialmente, la empresa no dio ninguna explicación: ni hubo una renuncia expresa a seguir batallando por GVT tras la opa lanzada por Telefónica ni tampoco se materializó una contraoferta para ganar a la española.
Ayer se supo algo más, pero no fue Vivendi quien lo dijo, sino GVT. La operadora brasileña comunicó a su regulador que el consejo de Vivendi ha dado el visto bueno para que la compañía siga en la lucha y lance una contraopa por GVT.
Lo ha hecho después de terminar la auditoría interna que estaba realizando desde septiembre, cuando acordó con los socios fundadores de GVT comprar la compañía. Pero esta aprobación no implica ningún movimiento inmediato. Vivendi sigue en la misma situación en la que estaba la semana pasada: estudiando la conveniencia de lanzar una contraopa o retirarse.
El mercado sigue apostando porque va a haber una guerra de ofertas entre Telefónica y Vivendi. Por tercer día consecutivo, las acciones de GVT cotizaron en Bolsa por encima del precio ofrecido por la española, 48 reales por acción. Telefónica ofrece en conjunto 2.550 millones de euros, un 14% más que la propuesta inicial de Vivendi.