Caixa Catalunya cede peso y amarra la fusión con Tarragona y Manresa
Aporta el 80% de los activos pero sólo representará al 60% del consejo Caixa Catalunya designará el 60% de los órganos de gobierno de la nueva entidad que surgirá de la fusión con las cajas de Tarragona y Manresa. A pesar de aportar cerca del 80% de los activos, la entidad que preside Narcís Serra ha cedido parte de su peso para evitar que la integración fuera una absorción.
La reestructuración de las cajas de ahorros comienza a acelerarse. Ayer los consejos de administración de Caixa Catalunya, Tarragona y Manresa aprobaron su fusión con la creación de un primer grupo de trabajo que definirá el proyecto. Caixa Catalunya, que aporta casi el 80% de los activos (65.000 millones de euros), tendrá una representación del 60% en los órganos de gobierno de la futura entidad, que buscará una nueva marca.
La institución que preside Narcís Serra y cuyos vicepresidentes son Joan Güell y Antoni Llardén, ha repartido un 20% de su peso entre los otros dos socios: Caixa Tarragona y Caixa Manresa, que tendrán cada una un 20% de los representantes. De esta forma, Catalunya vence las reticencias de la Diputación de Tarragona, que pretendía alcanzar hasta un 30% del consejo y la asamblea, y consigue evitar que la integración se considere como una pura absorción. Caixa Manresa surge como la gran vencedora, puesto que sólo aporta el 8,3% de los activos (6.800 millones), pero tendrá la citada representación del 20%. Así, el reparto de poder en la asamblea de la caja fusionada por parte de las entidades fundadoras correspondrá en un 58,6% a la Diputación de Barcelona (Caixa Catalunya), un 20,7% para la Diputación de Tarragona otro porcentaje igual destinado a las corporaciones y entidades vinculadas a Caixa Manresa (única privada de las tres).
De los 160 miembros de la asamblea, 56 surgirán de las corporaciones fundadoras y 24 de las corporaciones locales. Otros 60 pertenecerán a los impositores y 20 a los empleados. La nueva caja mantendrá una presidencia y dos vicepresidencias, además de otras dos vicepresidencias para los impositores y corporaciones locales. El consejo contará con 21 miembros (siete para entidades fundadoras, tres para corporaciones locales, ocho para impositores y tres para empleados).
La futura entidad será la cuarta caja española, con unos activos de 81.000 millones, y una red de 1.600 oficinas. Tras más de cuatro horas de reunión, las tres cajas emitieron un comunicado pactado, en el que no incluyeron las magnitudes descritas de la nueva caja, ni referencia alguna a las ayudas que solicitarán al fondo de ayuda estatal. Portavoces de las cajas señalaron que las reuniones de los consejos sólo querían dar luz verde al proyecto, y que las tres votaciones se aprobaron por unanimidad.
La integración de las cajas de Catalunya, Tarragona y Manresa prevé cerrarse en el primer semestre de 2010. El domicilio social será la actual sede barcelonesa de Caixa Catalunya, mientras que las otras dos cajas seguirán como sedes territoriales. En cuanto a la obra social, las fundaciones de Caixa Tarragona y Manresa gestionarán un 15% cada una de la inversión. El restante 70% quedará en manos de la nueva entidad.
Caja Insular de Canarias también confirmó ayer la búsqueda de alianzas con las cajas que integran Atca -Caja Rioja y CAI-. Además, el presidente Cajasol, Antonio Pulido, habló de la voluntad de su entidad de participar en el proceso de reestructuración del sector. Tras decir que la caja no participará al final en la puja por CCM, aseguróo que las fusiones virtuales "no son un mal modelo".
Cajasol cerrará 100 oficinas este año para reducir costes
El presidente de Cajasol, Antonio Pulido, explicó ayer los planes que han puesto en marcha para mejorar la eficiencia de la firma. El puntal de la iniciativa es el cierre de oficinas. Hasta ahora, ha clausurado "más de 70" y, las previsiones es acabar el año con 100 locales menos de los que tenía al concluir 2008, lo que supone un recorte superior al 10%. Con esta fórmula ha bajado ya sus gastos generales un 15% a septiembre. "La caja está comprometida con una optimización permanente de nuestros costes, así como con el aumento de la solvencia", apuntó Pulido, durante la presentación de los actos conmemorativos del 175 aniversario de la caja.