El ex número dos de Sos se desmarca del desvío de fondos
El ex vicepresidente de Sos, Jaime Salazar, se desmarcó ayer ante la Audiencia Nacional del desvío de fondos a las sociedades patrimoniales controladas por su familia. Aseguró que su labor era sólo operativa y que no tenía constancia de las operaciones financieras.
El ex presidente de Sos acudió este miércoles a la Audiencia Nacional para explicar que todos los miembros del consejo de administración del grupo conocían y aprobaron los detalles del trasvase de 230 millones desde la tesorería de la empresa hasta sus patrimoniales. Y sólo un día después, sus palabras quedan en entredicho tras la declaración de su hermano y ex vicepresidente, Jaime Salazar.
Quien fuera el segundo mayor accionista de Sos, sólo por detrás de su hermano, explicó al juez Fernando Andreu que no participó activamente en el trasvase de fondos en favor de sus sociedades, según señalan fuentes jurídicas. Jaime Salazar argumentó en su declaración que sus funciones dentro de Sos eran "operativas y no financieras" por lo que no tuvo constancia del desvío hasta que la compañía lo comunicó a la CNMV.
Es decir, no las conoció hasta abril de 2008 cuando Sos empezó a informar al regulador sobre la existencia de un autocrédito con el objetivo de llevar a cabo una operación corporativa. Con ella, según los Salazar, se pretendía dar entrada en el capital a un fondo soberano libio. Sin embargo, la compañía ha detectado en auditorías realizadas en 2009 el trasvase de fondos a sociedades de los Salazar realizados en 2007, un año antes de que se informara a la CNMV.
"Ha puesto distancia", aseguraban las citadas fuentes al valorar su declaración ante el juez Andreu. De la misma forma, apuntó su desconocimiento respecto al posible respaldo al desvío de fondos por parte del presidente de la CNMV, Julio Segura. Jesús Salazar aseguró el miércoles que consultó con Segura la posibilidad de articular el desvío de fondos cómo crédito en favor de Cóndor Plus y no como provisión. De esta forma, según Salazar, Segura habría respaldado la maniobra para no dañar los resultados de Sos. Sin embargo, la CNMV ha negado rotundamente cualquier encuentro entre Segura y Salazar.
Sin embargo, el ex vicepresidente de Sos sí respaldó a su hermano al asegurar que el consejo apoyó el crédito a Condor en su reunión del 27 de febrero. Sin embargo, según las citadas fuentes, Jesús Salazar aseguró el pasado abril a la CNMV que sólo él, su hermano y el consejero Daniel Klein conocían la existencia del autocrédito. Jaime Salazar, además de ser ex vicepresidente de Sos es propietario de las sociedades Alvan y Corporación Industrial Salazar, dos de las 24 firmas patrimoniales vinculadas a su familia. A través de ellas, supuestamente transitaron los 230 millones que se desviaron desde las cuentas de Sos. Al igual que su hermano, Jaime Salazar está imputado por presunta estafa y apropiación indebida.
Testaferros que firman sin preguntar
Junto a los Salazar también han declarado por presunta estafa y apropiación indebida dos testaferros de sus patrimoniales. Aseguraron que firmaban las operaciones sin preguntar y basándose en su confianza personal con Jesús Salazar, según fuentes jurídicas. El primero en declarar fue Pedro Barragán, propietario de Tamagan, sociedad titular de Aceites Cañavera, que recibió tres transferencias de cerca de 20 millones de euros procedentes de Sos. El imputado también figura en Unión de Capitales, otra patrimonial de Salazar. Según las citadas fuentes, Barragán no explicó al juez Andreu cómo adquirió Tamagan ni si Aceites Cañaveral dependía de ella. El segundo en comparecer fue Esteban Herrero, ex director de operaciones del grupo alimentario, propietario de Condor Plus y con participación en Unión de Capitales, quien explicó que Jesús Salazar le pidió utilizar la sociedad de su propiedad para realizar una operación "corporativa, estratégica y confidencial".