El blog de Gaziel y Tony Blair
Enre 1946 y 1953, Gaziel (seudónimo del periodista catalán Agustí Calvet) anotó sus reflexiones políticas y personales en una "especie de dietario muy íntimo", sin apenas esperanza de que alguna vez vieran la luz. Leídas hoy, esas notas tienen la familiar cadencia de un blog. Y las relativas a “Inglaterra” siguen de actualidad.
El que fuera director de La Vanguardia, reconoce el “insuperado refinamiento” de la política del antiguo Imperio Británico. Pero encuentra en ella “no pocas taras” cuando la observa “fríamente y de cerca”. Entre las más graves, según Gaziel, la de haber seguido fomentando la división de Europa tras la I Guerra Mundial. Hasta el punto de que el autor culpa a Londres de haber facilitado o propiciado el nuevo enfrentamiento entre Berlín y París y asegura que “la guerra de 1939 fue por parte de Inglaterra un perfecto error, cometido a causa de su inadaptación como potencia plenamente europea”.
Gaziel parece escribir despechado por la tolerancia de Churchill con el régimen franquista. Pero quizá acierta cuando retrata la equívoca relación de Gran Bretaña con el continente europeo. “Esta Europa que la propia Inglaterra no ha querido ni sabido unificar nunca, ¿quién se encargará de enderezarla ahora?”, se pregunta. Y duda que lo pueda hacer un anacrónico Imperio que “todavía no sabe acostumbrarse a su nuevo papel, ni desacostumbrarse del antiguo, que ya es algo caduco”.
60 años después, los diplomáticos ingleses parecen seguir con el trauma “de un marinero de toda la vida que por fuerza ha tenido que volverse campesino”. Pero mantienen también su “finura” y su habilidad para entorpecer cualquier avance hacia la unidad del continente. El próximo es la creación de una presidencia estable del Consejo Europeo. Y Londres ya ha colocado en primera fila a su particular caballo de Troya.
Foto: Tony Blair como Enviado Especial del Cuarteto en Oriento Medio (archivo de la CE, julio 2007).