Los sindicatos inician movilizaciones cargando contra Ordóñez y la CEOE
"Es la hora de retomar la senda de la movilización. ¡Si no hay acuerdo con la patronal, una gran manifestación nacional recorrerá las calles de Madrid en diciembre!", clamó ayer el secretario general de CC OO de esta región, Javier López, ante las 7.000 personas, según los sindicatos, que se concentraron en la capital. Se trataba de uno de los 45 actos celebrados en toda España en la II Jornada Internacional por el Trabajo Decente. Muchos de ellos, como los de Navarra, La Rioja o Castilla y León, tuvieron lugar frente a las sedes de la patronal, a la que se acusa de bloquear 1.842 nuevos convenios colectivos y de no cumplir centenares de los firmados. Pese a que las centrales sindicales y la CEOE se han dado dos semanas para alcanzar un pacto, los representantes de los trabajadores han llamado a la protesta "en las calles y en los centros de trabajo".
Se preparan asambleas informativas y concentraciones contra los empresarios que no cumplan los incrementos salariales pactados. Serán el preludio del "gran acto" que llegará a finales de año. El principal receptor de las críticas de la jornada, Gerardo Díaz Ferrán, compartió diana con Miguel Ángel Fernández Ordóñez. "El gobernador del Banco de España y el presidente de la CEOE lo que quieren es el despido libre y el fin de la tutela judicial para los expedientes de regulación de empleo", acusó el secretario general de CC OO, Ignacio Fernández Toxo. "Y cuando Ordóñez pide que se recorte el gasto social, lo que busca es que los parados no cobren prestaciones por desempleo. ¡Que lo diga claro!", exclamó. Tampoco los Presupuestos Generales que el Gobierno presenta para 2010 se libraron de los pitidos. "El cambio de modelo productivo exige que no desaparezcan las bonificaciones a la I+D", reclamó el líder de UGT, Cándido Méndez. æpermil;ste también abogó por ampliar la presión fiscal, pero gravando más a las rentas altas. Durante la concentración, convocada por la Confederación Sindical Internacional, se solicitó, además, una mayor supervisión sobre las entidades financieras.