"Tenemos que reinventar la rueda"

Acaba de ser ascendida aunpuesto internacional después denueve años desempeñando cargos de responsabilidad en la filial española. Ahora es una ejecutiva expatriada en París

Lleva poco más de un mes al frente de su nuevo cargo como directora de marketing y estrategia para Europa del Oeste y del Sur de Sodexo Services Voucher and Cards (SVC), empresa de servicios de calidad de vida, cuyo producto estrella es el ticket restaurante. Angelines Basagoiti, madrileña de 38 años, es licenciada en Gestión Comercial y Marketing por Esic, comenzó su carrera en 1993 trabajando en varias agencias de publicidad. También trabajó como responsable de marketing directo en Direct Seguros. Parece segura de sí misma, es discreta y los que trabajan con ella dicen que es una mujer amable.

Su gestión en España parece que ha sido recompensada con un ascenso en Europa a un puesto de más responsabilidad.

Sí, ha sido un gran cambio, sobre todo en el día a día. Ahora mi trabajo es más transversal, digamos que más enriquecedor porque ya no tienes el estrés de tener que mirar la cuenta de resultados. En estos momentos, mi cometido está más centrado en diseñar una visión estrategia, en saber hacia dónde vamos a ir en los próximos años. Trabajo con ocho países y eso me permite jugar más, estar en contacto directo con los directores generales de esos países, les ayudo a diseñar la estrategia de la compañía. Es un gran desafío el que tengo por delante.

¿Qué han valorado en usted para concederle este puesto?

En primer lugar, los resultados conseguidos en España, donde hemos realizado un gran cambio estratégico y hemos apostado por la visión a largo plazo. Nuestra matriz está en Francia y siempre ha apostado por la diversidad. El hecho de que sea mujer y extranjera, además de la edad, eran elementos atractivos para confiarme el puesto. Nuestro objetivo es fomentar la diversidad de género y la diversidad cultural, ya que el mundo cambia a gran velocidad, los clientes son cada vez más diversos y los equipos de trabajo han de tener apertura de miras y comprender que nos dirigimos hacia un mundo cada vez más cambiante y distinto. Tenemos que estar constantemente renovándonos. Por ejemplo, Sodexo tiene un proyecto en marcha de e-business, de entrada en Facebook y en Tuenti. Somos una compañía joven con ganas de hacer cosas y de ir acorde con los tiempos.

¿Ha sido difícil trasladar a toda su familia a vivir a París?

Es difícil pero hay que ser valiente y sobre todo, como a mí me ocurre, tener un marido que te apoye en todo y que no renuncie a su vida profesional. En mi caso, él tiene su propia empresa y es más fácil poder compaginarlo, aunque eso no quita que hayamos tenido una negociación colectiva. Todo en esta vida hay que negociarlo. Mis hijas tienen ocho y diez años y están en la edad justa para un traslado de este tipo, además me he ido a París, que está aquí al lado, pero es cierto que sin valentía y apoyo familiar es muy difícil tomar una decisión de este tipo.

¿Qué recomendación haría a otras ejecutivas en su misma situación?

Les recomendaría tirarse a la piscina, coger los trenes que pasan y confiar en uno mismo, y pensar que siempre se puede rehacer la vida, en España o en cualquier lugar. El mío es un caso atípico y las ejecutivas que conozco expatriadas no tienen familia, pero también existe el caso de mujeres que han dedicado su vida al trabajo y en un momento determinado han tenido que renunciar a su vida familiar, y cuando llegan a los 50 años y tienen encauzada a su familia retoman su carrera profesional. Yo me considero una privilegiada.

¿En qué ha cambiado su vida siendo expatriada?

Han cambiado mis rutinas, he perdido con los traslados, viajo mucho, paso dos o tres días de la semana fuera de la oficina y ahora no tengo tanto tiempo para dedicar a mi familia.

¿Cómo se ve a sí misma como ejecutiva?

Soy una persona abierta, responsable pero me divierto muchísimo trabajando. El marketing y la estrategia son mi pasión. Soy perfeccionista, exijo mucho pero soy humana, me encanta el trabajo en equipo y hacer del lugar donde trabajo un espacio agradable donde fluya la comunicación.

¿Cómo están viviendo la actual situación económica en Sodexo?

No somos ajenos al momento que estamos atravesando porque estamos en contacto con la realidad que están viviendo las empresas, que están recortando plantilla y por ese motivo se ve afectado en parte nuestro negocio, pero, por ejemplo, los vales de comida no se han suprimido porque están incluidos en los convenios colectivos de las empresas. Lo cierto es que con la crisis los servicios para la conciliación empiezan a recortarse. Tienen un gran recorrido pero en este momento se está parando, aunque las empresas, sobre todo las multinacionales, saben que la crisis será pasajera y que a los empleados tienen que motivarles y han de enfocarse en las personas de gran talento. Otras, pero más a nivel local y de menor tamaño, están haciendo recortes en este tipo de servicios que favorecen la conciliación y motivan al empleado.

¿Esto quiere decir que las multinacionales están mirando el largo plazo?

Por supuesto, piensan que tienen que estar preparados y están diseñando la estrategia para sacar beneficio a la salida de esta crisis. Para ello se necesita gente motivada y comprometida y sólo se compromete si puedes ayudar a tus empleados y les ofreces lo que necesitan. Quién tiene un hijo valora si recibe una ayuda para la guardería más que una prima. Son medidas que no son costosas para la empresa y se consigue tener empleados comprometidos, que son el gran valor que tiene una organización.

¿El área de marketing ha adquirido protagonismo con la crisis?

Es un buen momento para este área, ahora se presta más atención a la formación de los vendedores, con el fin de proporcionarles todos los elementos de la cultura corporativa. Las empresas necesitan buenos vendedores y ahora hay mucha más intensidad comercial.

¿Cómo se ve España desde fuera?

Somos el país más afectado por la crisis de Europa; a América Latina y Asia no ha llegado todavía con la misma intensidad. Todavía hay países que no están tan impactados y las grandes multinacionales se están dirigiendo a ellos. Eso es positivo porque sigue habiendo oportunidades.

¿Qué os piden las organizaciones a los ejecutivos para afrontar el momento?

Nos piden que salgamos de la rutina, que aportemos ideas y servicios nuevos, sobre todo a los directores de marketing. Es nuestro momento. Toda crisis supone una oportunidad y tenemos que mirar en positivo y buscar oportunidades de negocio. Por ejemplo, ahora las empresas que envasan salchichas se están forrando porque se consumen mucho más. En estos momentos, los ejecutivos tenemos que reinventar la rueda. Ya no sirve lo que teníamos.

¿Qué ideas nuevas están aplicando en Sodexo?

Por ejemplo, en Bélgica se ha lanzado el eco-cheque y se ha conseguido implicar al Gobierno para que ofrezcan ayudas para favorecer el medioambiente, de manera que se ofrece un importe anual para que la gente pueda comprar una nueva lavadora o una bicicleta. Otra de las propuestas que tenemos en marcha son las ayudas para hacer la compra, ayudamos a la gente a llenar el carro de la compra con ventaja fiscal porque de esta manera se reactiva el consumo.

¿El ticket restaurante o el de guardería ha calado en las empresas como elemento de retribución?

Las empresas lo aceptan por las ventajas fiscales que tiene. En las pequeñas y medianas empresas no ha calado todavía. Tenemos, en ese sentido, por delante el trabajo de informarles, porque no sabemos si tienen toda la información y creen que son iniciativas que van dirigidas a grandes empresas, y hacerles ver que este tipo de medidas son efectivas.

Desde hace nueve años trabaja en Sodexo, ¿qué es lo que le ha cautivado de esta empresa?

Me motivaron desde el primer momento porque yo estaba embarazada y me dijeron que mi estado no suponía un freno, y que estar cuatro meses de baja debido a mi maternidad no era un problema para la organización. La verdad es que me impresionó porque no es habitual encontrarte este planteamiento inicial y sin conocerte en una empresa. Además estoy muy contenta porque siempre me he sentido respetada, he ido asumiendo cargos de responsabilidad y me siguen confiando proyectos interesantes, como el que ahora desempeño.

"Hay que escuchar, mirar y aprender"

Angelines Basagoiti lleva nueve años trabajando para Sodexo, una empresa que la cautivó desde la primera entrevista de trabajo. En estos momentos, está inmersa en una vorágine de viajes y de relación con otras culturas, "trabajo con ingleses, turcos, con una gran variedad de gente que en mi actividad diaria me resulta muy enriquecedora, además de estar aprendiendo de ocho culturas diferentes que es apasionante por el momento que vivimos". Sobre el truco para no desfallecer en el intento, asegura que no es otro que "escuchar mucho, mirar y aprender porque sólo llevo un mes en el puesto". El objetivo de Basagoiti es poner un granito de arena en la estrategia global de Sodexo, de manera que la diversidad y la conciliación pueda estar en el día a día y de manera presente en todas las organizaciones.