Las cajas crecen en depósitos para mantener su liquidez
La tradicional guerra del pasivo se decanta del lado de las cajas. En julio, los depósitos a plazo en estas entidades crecieron en 4.245 millones de euros, mientras que entre los bancos se redujeron en 810 millones. Las cajas utilizan los ahorros de sus clientes como principal vía para obtener liquidez.
Las cajas de ahorros, sumidas en un intensivo proceso de reestructuración, mantienen su fuerte apuesta por la captación de pasivo, a diferencia de los bancos, que cada vez ofrecen menos depósitos a plazo.
Los últimos datos que ha hecho públicos el Banco de España, correspondientes a julio, revelan claramente esta tendencia. El sector de cajas registró un incremento mensual en su imposiciones a plazo fijo de 4.245 millones de euros, hasta alcanzar los 439.381 millones.
En ese mismo periodo, los bancos han visto retroceder su saldo en este tipo de productos en 810 millones de euros, siendo ya el cuarto mes consecutivo en que caen sus depósitos a plazo. Desde comienzos de año, este pasivo bancario se ha reducido en 2.720 millones, mientras que en las cajas ha crecido en 7.353 millones.
"Las cajas son más agresivas en precios porque tienen menos vías que los bancos para acceder a la liquidez", explica un directivo del sector del ahorro. "Hay entidades que están pagando euríbor más 200 puntos básicos, algo impensable hace unos años".
Ayer mismo, Caja Duero lanzaba un depósito estructurado que garantiza una remuneración del 3,04% TAE, cuando el euríbor a un año está en el 1,235%. Eso sí, los intereses son progresivos. Cuanto más tiempo se mantiene el capital en la caja, más aumenta su rentabilidad, Los intereses en el primer semestre son del 1,75%, mientras que el sexto alcazan el 5%.
Un producto similar lanzó Cajasur la semana pasada. El depósito Líquido Creciente 36 ofrece una rentabilidad que va subiendo semestre a semestre, hasta alcanzar el 6%. La tasa anual equivalente final es del 2,8%.
La semana anterior fue la gallega Caixanova quien comenzó a ofrecer un producto estructurado llamado Depósito Wayne. Sin embargo, los bancos llevan meses sin realizar campañas específicas para captar dinero con imposiciones a plazo fijo.
Cuentas corrientes
En el caso de los bancos, una de las tendencias que revelan los últimos datos es que parte del dinero que estaba en depósitos a plazo, está yendo a parar a cuentas de ahorro y a la vista, que han crecido en 16.574 millones de euros en lo que va de año, frente a los 8.692 millones de las cajas.
"Cuando la remuneración de las imposiciones a plazo fijo baja mucho, como ahora, los clientes optan por dejar el dinero en sus cuentas corrientes. El coste de oportunidad de tener ese dinero disponible es muy bajo", explica el directivo.
Otros dos factores que desincentivarán en los próximos meses este tipo de productos, que fue la estrella durante el pasado ejercicio, son el bajo nivel de inflación y el aumento de los impuestos sobre los rendimientos de capital. En el primer caso, porque hace que el dinero líquido no se deprecie tanto y, en el segundo, porque impactará negativamente sobre el ahorro.