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Comunidad Valenciana

Francisco Camps baja los impuestos

"No vamos a subir los impuestos". Así ha empezado esta mañana el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, su discurso en el Debate de Política General que se está celebrando en las Cortes Valencianas.

Francisco Camps, miembros de su Gobierno y parlamentarios del PP, en el Debate de Política General de la Comunidad Valenciana
Francisco Camps, miembros de su Gobierno y parlamentarios del PP, en el Debate de Política General de la Comunidad ValencianaCincoDías.com

Acosado por los informes policiales del caso Gürtel que apuntan a una presenta financiación ilegal del PP valenciano en el que estarían implicados altos cargos del ejecutivo y del partido, el presidente valenciano ha optado, al menos en la parte que ya ha pronunciado en el discurso, por obviar el tema y centrarse en aspectos económicos.

El primer anuncio que ha realizado Camps. "Vamos a rebajar el 10% la cuota autonómica del IRPF para las familias con dos o más hijos y con rentas inferiores a los 25.000 euros", lanzó Camps a los pocos minutos de iniciar el discurso. Aseguró que se beneficiarán 315.000 familias que se ahorrarán 15,7 millones de euros.

El presidente valenciano arremetió durante varios a partir de entonces contra el Gobierno central, al que acusó de tener una política económica errática y ser el causante de los males tanto de España como de lo que ocurre en todas las comunidades autónomas. Camps criticó el nuevo modelo de financiación. "El Gobierno de la nación no trata a los valencianos como merecen".

Camps también anunció una reducción de 300 millones de euros del gasto público. No se cubrirán vacantes en los puestos de trabajo público ni se crearán más (excepto educación, sanidad u justicia). Se reducirá el gasto un 5% en el presupuesto de 2010 y se rebajarán 35% las transferencias corrientes.

El presidente valenciano ha desgranado también las medidas que ha puesto en marcha en los últimos años para apoyar a la industria valenciana y ha anunciado un plan de infraestructuras estratégicas que supondrá una inversión de 25.000 millones de euros, fundamentalmente en carreteras y ferrocarril.

Tras su intervención llegará el turno al Grupo Socialista, que probablemente saque al debate la delicada situación del PP valenciano por los casos de supuesta corrupción.

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