Trichet dice que hay que "volver a política de control de cuentas públicas"
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, aseguró que es necesario "volver a una política de control de las cuentas públicas sostenible a medio y largo plazo" y que ésta se inicie, "a más tardar, con la recuperación económica".
En una entrevista con el diario italiano Corriere della Sera publicada hoy, Trichet apuntó que sin esa política de control no será posible lograr la recuperación económica esperada puesto que "los gobiernos no inspirarían confianza ni a las familias, ni a las empresas, ni a las entidades financieras".
"Ha sido precisamente la evaporación de esa confianza la que he llevado a crear turbulencias dramáticas. Ahora tenemos que hacer todo lo posible para reconstruirla", puntualizó.
Trichet habló además de la reciente cumbre del G20 en Pittsburg y subrayó que es importante que éste "sea concebido como el foro principal para la cooperación económica internacional, así como que al Fondo Monetario Internacional (FMI) le sea concedido un rol clave en su supervisión".
El presidente del BCE subrayó que es necesario "combinar" el hecho de que en el G20 existan "las presiones de diferentes países" con "la investigación analítica" del FMI.
Asimismo, apuntó que el G20 debe afrontar "la cuestión de los grandes desequilibrios que existen entre ahorros e inversiones en cada una de las naciones, además de los desequilibrios externos que no son sostenibles y que han sido la raíz de las dificultades actuales".
"Si no los corregimos (esos desequilibrios) tendremos que prepararnos para la próxima crisis. Y eso sería inaceptable", advirtió.
Preguntado sobre la posibilidad de que el crecimiento económico pueda anticiparse a las previsiones hechas por el BCE, Trichet afirmó que este mes su equipo ha calculado que la economía real de media podría crecer "un poco en 2009 y en 2010 respecto a lo previsto hace tres meses".
Trichet, no obstante, precisó que "de media 2009 será muy negativo y que quizá 2010 sea ligeramente positivo".
"No excluyo que en la zona euro podamos tener un crecimiento positivo, trimestre a trimestre, antes de la primera mitad de 2010, como ya habíamos anunciado. Pero eso no cambia nuestro mensaje principal. Tenemos por delante un camino lleno de obstáculos y el nivel de incertidumbre continúa siendo excepcionalmente elevado, y sugiere prudencia", explicó.
"Actualmente la caída libre de la economía se ha frenado. Ahora mucho depende de nosotros, de nuestra capacidad de devolver la confianza en los procesos de decisión de la economía real, en las familias y en las instituciones financieras", concluyó.