Las Cámaras, preocupadas porque la reestructuración del sistema financiero "genere un oligopolio"
El presidente del Consejo Superior de Cámaras de Comercio, Javier Gómez-Navarro, abogó hoy por reestructurar el sistema financiero español, aunque precisó que les "preocupa mucho" que "se reduzca tanto el número de entidades que se genere un oligopolio en el cual no haya competencia".
Gómez-Navarro se pronunció así en la rueda de prensa previa a la reunión del pleno del Consejo Superior de Cámaras de Comercio celebrada en Valencia, con motivo del centenario de la Asamblea General de Cámaras de Comercio organizada en 1909 en el marco de la Exposición Regional Valenciana, y en la que detalló el documento con propuestas ante la crisis elaborado el pasado mes de mayo.
"Nos preocupa mucho que al final sólo queden dos o tres bancos y que, por lo tanto, estés en mano de dos o tres instituciones financieras sólo", insistió Gómez-Navarro, quien planteó que "una cosa es que haya demasiadas cajas, y otra cosa es que al final sólo queden tres o cuatro cajas".
Rehusó pronunciarse sobre la conveniencia de acometer fusiones entre entidades por no tener "la información ni los criterios para juzgarlo", y resaltó que "es una tarea del Banco de España, que tiene que ser el que valore qué instituciones pueden seguir solas y cuáles no, y cómo está de dañada la cartera de créditos de unas instituciones y otras", en lo que "va a influir mucho el nivel de morosidad", dijo.
En cualquier caso, recalcó que el sistema financiero español "va a tener que ser mucho más competitivo, mucho más eficaz y mucho más eficiente", puesto que "va a tener muchos menos ingresos".
Así, deberá "reducir la dimensión de los costes de intermediación", lo que, según dijo, "quiere decir que va a haber que reducir de manera muy significativa el número de oficinas" y que "algunas instituciones no tienen dimensión para competir en un mercado que va a ser más difícil" por la "bajada brutal" de los ingresos bancarios provocada por la caída del euribor.
Preguntado por el acceso de las pymes a la financiación, Gómez-Navarro aseguró que el flujo de liquidez bancaria no está llegando a las empresas mejor que hace unos meses, "tajantemente no", dijo.
En la misma línea, resaltó que "no hay un cambio significativo ni relevante en la financiación de las pyme", de modo que "la mayor parte de las pyme siguen infrafinanciadas, no tienen el dinero que necesitan, lo cual está generando un proceso continuo de suspensión de pagos y de desaparición de las empresas".
Gómez-Navarro descartó que esos problemas de financiación se deban al menor nivel de ingresos de las entidades financieras por la caída del euribor, y, de hecho, estimó que esa financiación "no existe porque los bancos están sobrepasados en el ratio entre cartera de créditos y recursos propios".
Explicó, en este sentido, que el sistema financiero español "está reduciendo sus recursos propios porque está provisionando la morosidad con recursos propios", lo que le obliga a "bajar la cartera de créditos" dado que ésta "no puede superar en doce veces los recursos propios", y ello, "aunque tenga en estos momentos resuelto el problema de liquidez", apuntó.
Gómez-Navarro indicó que ante ese "problema de déficit de capital o de demasiado crédito", las opciones son "crear una institución que retire a los bancos la cartera de crédito dañado" o "insuflarles capital", opción escogida por el Gobierno español con la aprobación el pasado viernes de un Real Decreto-Ley por el que se crea el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) para "capitalizar las entidades financieras y aumentar su capacidad de dar créditos".
"Que además haya que fusionar, y que además haya que optimizar e intentar mejorar la eficiencia y la eficacia del sistema son elementos añadidos, positivos, pero el problema principal es que el sistema financiero no tiene recursos propios para la dimensión del crédito que han dado y que tienen que dar para mantener la economía", sentenció.
Por otro lado, el presidente del Consejo Superior de Cámaras de Comercio se refirió también a otras medidas que consideran necesarias para afrontar la crisis económica actual, entre las que figuran la disminución en tres puntos la cotización de las empresas a la Seguridad Social y la reducción de la tributación de los beneficios no distribuidos -reinvertidos- en el impuesto sobre sociedades.
Menor aportación a la seguridad social
Gómez-Navarro hizo hincapié en la conveniencia de rebajar la aportación de las empresas a la Seguridad Social, ya que España es el país europeo "donde la participación de las empresas es más importante" en esas cuotas sociales, puesto que "el trabajador paga una séptima parte" y las empresas el resto, mientras que en países como Alemania esas aportaciones a la Seguridad Social "se pagan prácticamente al 50 por ciento entre empresa y trabajador", subrayó.
Destacó que con esa disminución de las cotizaciones a la Seguridad pretenden lograr "una rebaja de los costes laborales no salariales" y "un replanteamiento sobre la filosofía de cómo financiar el sistema de protección social" español, financiado exclusivamente con las cuotas de los productos y servicios producidos en España, a diferencia de lo que sucede en países como Dinamarca, donde lo pagan, mediante un impuesto de consumo, todos los productos que allí se consumen, "vengan de donde vengan", insistió.
Abogó así por que se sustente también en el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), algo que "se están planteando casi todos los países", de modo que se rebajen "tres puntos" las cotizaciones de las empresas a la Seguridad Social y se suba el IVA "un poquito más de un punto", algo que puede hacerse "sin ningún problema", puesto que "España tiene, con excepción de Luxemburgo, el IVA más bajo de la Comunidad Europea".