El estudio, del grupo ecologista Greenpeace, de la Asociación de Electricidad Termo Solar Europea (ESTELA, en sus siglas inglesas) y el grupo SolarPACES del Organismo Internacional de la Energía (OIE), dijeron que la enormes inversiones necesarias crearán también empleos y ayudarán en la lucha contra el cambio climático.
"Las plantas de energía solar son el siguiente gran paso en la energía renovable", dijo Sven Teske de Greenpeace International y coautor del informe. La tecnología es idónea para regiones cálidas y sin nubes como Sáhara y Oriente Próximo.
Según el informe, las inversiones en plantas de energía solar concentrada (CSP, en sus siglas en inglés) va a superar los 2.000 millones de euros en todo el mundo este año, con las mayores instalaciones construyéndose en el sur de España y California.
"La energía solar concentrada podría alcanzar hasta el 7% de la energía mundial prevista para 2030 y una cuarta parte para 2050", señaló como el escenario más optimista.
Eso implica un enorme incremento en inversiones de 21.000 millones de euros al año hasta 2015 y de 174.000 millones de euros anuales hasta 2050, creando cientos de miles de empleos. Sobre ese escenario, las centrales solares tendrían una capacidad instalada de 1.500 gigavatios para 2050.
Esas cifras son mucho más optimistas que las proyecciones de la OIE, una agencia con sede en París que asesora a los países ricos. Este organismo indica que para "2050 la penetración de la energía solar no superará el 0,2% del total mundial".