Ningún producto de ahorro logra la confianza del inversor
Los productos de ahorro sufren una pérdida de confianza generalizada por las turbulencias financieras y la crisis inmobiliaria. Así lo atestigua un estudio de Unespa. La seguridad y la transparencia del producto desplazan a la rentabilidad como los elementos prioritarios en una inversión.
No existe ninguna alternativa de inversión de entre las propuestas que pueda ser considerada como la opción donde es acertado colocar el dinero". Esta es una de las conclusiones que aparece en la Memoria Social del Seguro presentada ayer por Unespa. La patronal del seguro ha sondeado a 1.012 personas distribuidas por todo el país para vislumbrar si las turbulencias financieras y la crisis inmobiliaria han hecho mella sobre sus estrategias de ahorro.
El resultado ha sido demoledor. Ninguna de las siete alternativas de inversión sugeridas llega al aprobado. La mejor situada es la inversión en vivienda, con una nota de 4,8 sobre 10. Le siguen en la clasificación los seguros de vida, con un 4,6.
Las propuestas cuya imagen más se ha deteriorado, de acuerdo con el estudio de la patronal aseguradora, han sido dos alternativas bastante dispares entre sí: los depósitos, una salida tradicional para el dinero más conservador; y los fondos de inversión, una opción predilecta entre los más aventureros. Para Pilar González de Frutos, presidenta de Unespa, "el deterioro de la confianza en bancos y cajas de ahorros probablemente ha jugado en contra de estos dos productos en los últimos meses". La inversión inmobiliaria también ha sufrido un traspiés reputacional importante.
Los malos tragos generados por casos como la estafa Madoff, la quiebra de Lehman o el desplome de varios fondos inmobiliarios han provocado que varíen las prioridades de los inversores. Ahora, éstos dan más importancia a que el producto no tenga riesgo de pérdida y que se entienda fácilmente (ambas categorías anotan un 8,4 sobre 10). En cambio, que la inversión sea muy rentable aunque tenga riesgo pierde fuelle (se valora con 4,3 puntos sobre 10). Unespa considera que esto "es una reacción clásica y lógica ante el entorno de crisis económica y la incertidumbre sobre la pertinencia de las distintas formas de ahorro".
González de Frutos afirmó que "tenemos que corregir entre todos la baja cultura financiera de los particulares, que hace que acaben contratando unos productos financieros que no se adaptan a sus necesidades reales".
El seguro europeo, a prueba
Las 30 mayores aseguradoras europeas deberán afrontar una prueba de resistencia (stress test, en inglés) que mida su aguante ante la crisis financiera. Así lo indicó ayer Thomas Steffen, responsable del supervisor alemán y actual presidente del colegio de supervisores nacionales europeos (Ceiops). El examen se llevará a cabo en 2010 y estará basado en los resultados de 2009. Algunos grupos ya están sometidos a controles nacionales. La intención ahora es extender esas pruebas a toda Europa.