La obra de Tàpies se instala a orillas del río Hudson
Siguiendo el curso del río Hudson hacia el norte desde la ciudad de Nueva York, pasando la academia militar de West Point, y antes de llegar a Hyde Park, el lugar de nacimiento e infancia de Franklin D. Roosevelt, se encuentra Beacon, una localidad que ha visto como la fábrica que levantó Nabisco en 1929 es ahora hogar de la Fundación Dia Art.
Es uno de los lugares de peregrinaje obligatorio para los amantes del arte contemporáneo. Ahora es, además, un placentero viaje obligatorio para los amantes de Antoni Tàpies en América, quienes hace más de una década no tienen oportunidad de ver una exposición de este artista.
Esta fundación abrió el pasado sábado y hasta el 19 de octubre una exhibición de 19 de sus obras bajo el título Los recursos de la retórica.
La exposición es la primera de una serie de colaboraciones del museo Reina Sofía de Madrid y la Fundación Dia Art y el día de su inauguración coincidió con el último día de residencia de la compañía de danza de Merce Cunningham. La danza de este nonagenario genio del movimiento acompañó al debut de las obras de un artista catalán que según Manuel Borja-Villel, director del Museo Nacional Reina Sofía de Madrid, "tiene mucha ilusión en esta exposición".
Borja-Viallel, quien fue director del museo de la fundación de este artista, aseguraba el sábado que una exposición tipo blockbuster en Nueva York "no le habría hecho un favor a Tàpies. Esta es como una operación de cirugía y va a tener una repercusión muy importante". Según Borja Viallel, la Fundacion Dia - a una hora en tren de la ciudad, y compartiendo espacio con artistas como Richard Serra, Walter de Maria, Donald Judd y Max Neuhaus, entre otros-, es el museo natural para la expresión de un artista que ha sido "empujado de la historia" por estar desclasificada y a caballo entre dos periodos, el modernismo protagonizado por Rothko y Pollock y el arte minimalista.
De acuerdo con el rector del Reina Sofía, Tàpies siempre ha sido visto como un continuador de la obra de Miró, Picasso pero su obra es "en cierta medida antimodernista por el uso de la materialidad, la escritura, la teatralidad y sobre todo el elemento narrativo de ella" y por ello su obra encuentra un mejor acomodo en un museo como el de Beacon.
"El espacio de Dia contextualiza a Tàpies". Borja Villel lo tiene claro, "Tàpies no necesita mercados, necesita volver a la historia", la de la Fundación Dia es, desde luego, una de las puertas más interesantes para dar ese paso.