La deuda corporativa evitó posibles bloqueos en entidades y mantendrá su "atractivo" durante 2009
El mercado de renta fija contribuyó a evitar posibles bloqueos en el funcionamiento de las entidades bancarias españolas e instituciones centrales, según se desprende del informe sobre renta fija publicado hoy por Bolsas y Mercados Españoles (BME), que pone de manifiesto que durante 2009, la deuda seguirá siendo un recurso lo suficientemente "atractivo" como para movilizar a un buen número de emisores.
En este sentido, el estudio destaca que a través del AIAF pudo generarse los colaterales que el sistema bancario ha utilizado para el descuento en el Banco Central Europeo (BCE), única vía a la que se podía acudir hasta la creación del Fondo de Adquisición de Activos Financieros (FAAF).
Según subraya, el mercado se ha convertido en un "potente" instrumento para que las entidades bancarias lograran encontrar en el BCE una alternativa a la imposibilidad de colocar sus emisiones en el mercado, debido a los altos 'spreads', y poder salvar la falta de liquidez sin que se hayan producido tensiones de gravedad.
De este modo, la actividad de la deuda corporativa superó las previsiones establecidas a comienzo del ejercicio y marcó un récord histórico, con 2,4 billones de euros en el conjunto del año. El informe sostiene que, aunque el futuro se presenta complejo y lleno de incertidumbres, la deuda corporativa es un recurso con suficiente atractivo para movilizar a un buen número de emisores, que en el inicio del presente año han acudido a los mercados.
En este sentido, subraya que la apelación de los países al mercado será mayor, como consecuencia de las medidas puestas en marcha por el Gobierno para combatir la crisis, y que, en este marco, deberá competir la deuda privada, aunque los diferenciales de rentabilidad, con o sin avales, son una "poderosa razón" para encontrar su hueco en el mercado y contribuir a que poco a poco se incremente la liquidez y vayan surgiendo las oportunidades.
Asimismo, el informe destaca que la deuda pública se ha convirtió en un valor refugio de los inversores que abandonaban los mercados de crédito, tomando posiciones en aquellos valores que, tradicionalmente están considerados como libres de riesgo, produciéndose un trasvase de las carteras a corto hacia Letras del Tesoro u otros activos financieros emitidos por el sector público en plazos similares.
En concreto, 2008 ha supuesto un cambio en la evolución de la financiación del Tesoro Español, ya que la deuda en circulación ha crecido en 51.300 millones de euros más de lo inicialmente previsto.
La deuda en circulación se situó en 2008 en 358.000 euros, lo que supone un ratio de deuda sobre el PIB del 39,5%, muy lejos del ratio de la media europea, que está por encima del 60%. Asimismo, la mayoría de la financiación del Estado ha provenido de la emisión bruta de bonos y obligaciones del Estado que fue de 62.100 millones de euros.