La UE prepara un tribunal de patentes que limita el uso del español en los litigios
La Unión Europea está negociando la creación de un tribunal de patentes supranacional que puede limitar seriamente el uso del español en ese tipo de litigios, incluso cuando una de las empresas involucradas sea española.
La Unión Europea tiene ya preparado un borrador de Acuerdo para la creación de un Tribunal internacional de patentes que, según las fuentes consultadas, puede reducir dramáticamente el uso del español en ese tipo de litigios.
El documento, al que ha tenido acceso CincoDías, establece una estructura descentralizada en la que cada división local o regional actuará en la lengua oficial del país donde esté radicada. Los procedimientos ante el órgano central del Tribunal, sin embargo, se harán siempre en la lengua en que fue expedida la patente. Es decir, en inglés, francés o alemán, si se trata de un título emitido por la Oficina europea de Patentes con sede en Múnich. Y, probablemente, en esas mismas lenguas, si la futura patente comunitaria (sobre la que se trabaja sin éxito desde hace 10 años) repite el régimen lingüístico de Múnich.
Las fuentes consultadas advierten que la división central tendrá competencias exclusivas sobre toda una serie de actuaciones del Tribunal, por lo que los casos no se podrán tramitar en español aunque sea la lengua de alguna o de las dos partes intervinientes.
La UE tiene ya preparado un borrador sobre el régimen del tribunal.
Entre los litigios que deberán resolverse en inglés, francés o alemán figuran los relativos a la validez o nulidad de una patente, un proceso que suele ser previo a la resolución de cualquier conflicto sobre una posible violación de la propiedad intelectual. Sólo en casos excepcionales, señala un experto jurista, ese tipo de procesos podría desarrollarse plenamente en la división española.
Para ello sería necesario que la empresa demandada reclamase a su vez la nulidad de la patente en propiedad del demandante. Y que la sección española del Tribunal decidiese continuar con el procedimiento.
Pero ni siquiera en esas circunstancias la empresa española tendría garantizado la continuidad del juicio en su lengua porque, según el borrador del Acuerdo, en la división nacional figurarán tres jueces pero totalmente independientes del poder judicial español.
El Acuerdo sólo prevé que dos de los jueces sean de la nacionalidad del país en cuestión y el tercero de otro país. Pero en el caso de que una empresa española contraatacase ante un demanda para poder seguir el litigio en castellano, al tribunal debería sumarse un cuarto juez también de otra nacionalidad.
La rocambolesca estructura del futuro Tribunal de patentes ha surgido ante la imposibilidad de pactar en el seno de la UE la creación de una patente comunitaria con un sistema propio de resolución de litigios. La Comisión Europea ha renunciado a seguir intentándolo y hace unas semanas pidió permiso al Consejo de Ministros de la UE para negociar un convenio internacional con los países miembros de la Oficina de Patentes de Múnich con el fin de establecer un "sistema unificado de resolución de litigios sobre patentes". Se trata del primer paso para la creación de un Tribunal internacional que dirima todas las cuestiones de la validez de una patente en la lengua en que fue concedida.
Bruselas renuncia, por tanto, a atribuir esa potestad al Tribunal europeo de Luxemburgo, que trabaja en las 23 lenguas oficiales de la UE, a pesar de que el actual Tratado de la Unión permite crear en esa Corte una sala especializada para patentes.
La alternativa presentada por la Comisión que preside José Manuel Barroso parece responder, según las voces críticas con el proyecto, a la presión de los países europeos con más registros de patentes. Alemania y Holanda, sobre todo, querrían contar cuanto antes, según esas tesis, con una jurisdicción única en propiedad intelectual para ahorrar costes a sus multinacionales.
Fuentes comunitarias, sin embargo, aseguran que no recuerdan ningún precedente en que Bruselas haya decidido externalizar al ámbito internacional una competencia que puede desarrollar por sí misma
Las cifras
50 mil euros cuesta un pleito por patentes en primera instancia en Francia, Alemania y Holanda. Millón y medio en Reino Unido.2.000 de las demandas sobre patentes en la UE se plantean en Alemania, Francia, Holanda y Reino Unido.90% demandas por violación o nulidad de patentes se plantean al año en la UE.