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Antonio Beteta

'Salgado está preparada, pero la financiación la marca Zapatero'

Liberal y partidario acérrimo de bajar impuestos, Antonio Beteta no deposita demasiadas esperanzas en los recientes cambios del Gobierno de Zapatero. Duda de que la entrada de Salgado y Chaves en el tablero autonómico se traduzca en un avance en la negociación de la reforma de la financiación regional.

Antonio Beteta, Consejero de Economía de Madrid
Antonio Beteta, Consejero de Economía de MadridM. Casamayón

Cuando Esperanza Aguirre remodeló el Gobierno el año pasado, llamó a Antonio Beteta (Madrid, 1955) para pilotar la Consejería de Economía yHacienda. La presidenta deMadrid depositó su confianza en él para impulsar una política de corte liberal y llevar las negociaciones de la reforma de la financiación autonómica, un área que conoce bien, ya que participó como secretario de Política Fiscal Territorial en la elaboración del actual modelo de financiación con el Gobierno de José María Aznar.

La elección de Salgado en sustitución de Solbes, ¿en qué puede modificar la negociación de la financiación autonómica?

En nada. El cambio de Gobierno es una operación de maquillaje. Aquí el guionista [Zapatero] es el mismo y los actores [los ministros] sólo interpretan el papel que les marca el guionista. Lo importante es ver qué idea de España tiene el presidente y cómo se plasma en una cuestión matemática como el sistema de financiación.

¿Cree que Elena Salgado está preparada para ser vicepresidenta económica?

No lo dudo, está preparada. Pero la financiación la marca Zapatero.

¿Confía en alcanzar un acuerdo sobre la financiación en breve?

Soy muy escéptico.

¿Por qué?

El Gobierno semetió en un laberinto con el Estatuto de Cataluña y, en consecuencia, pretender compatibilizar la existencia de un modelo de financiación autonómica con determinados principios del Estatuto catalán resulta complejo.

Sin embargo, la propuesta que presentó el Gobierno en diciembre fue bien recibida en Madrid.

Sí, porque cumplía con el decálogo que habíamos presentado. Incluía, la actualización del modelo a la población real, ya queMadrid tiene 1.200.000 habitantes que no se tienen en cuenta a la hora de repartir los recursos autonómicos. Reclamábamos también el principio de equidad, es decir, que aquellos ciudadanos que más pagan tienen derecho a tener unos adecuados servicios. No por pagar más, vas a recibir menos, eso sería una auténtica barbaridad. Sobre éste y otros puntos ya había un principio de acuerdo.

Entonces, ¿dónde está el problema?

En febrero, que fue la última vez que nos reunimos con el Gobierno, alcanzamos ya un principio de acuerdo. Pero después hemos visto que, ante la oposición de Cataluña al modelo, el Gobierno seguía negociando por ese lado y sin informarnos. Aunque nos pueda gustar el modelo, si vemos que se introduce algún tipo de privilegio para alguna comunidad autónoma, nosotros nos posicionaremos en contra.

¿Negociaron con el Gobierno cifras concretas?

Sí, pero no me gusta hablar de ello. El modelo de financiación es un elemento estructural que define a España y, en consecuencia, es mucho más importante la estructura del modelo que las cifras.

¿El sistema de financiación actual no cumple el principio de equidad?

No, porque no se ha actualizado la población. Si se hubiera hecho, tal y como se preveía en el modelo, sí que se hubieran alcanzado los objetivos.

¿Cómo valora elnuevo rol de Chaves como interlocutor entre el Gobierno y las autonomías?

Zapatero puede estructurar el Gobierno como quiera, aunque crear una nueva vicepresidencia en un momento de crisis no tiene ninguna lógica. Sería mejor reducir el número de ministerios insustanciales que ahora mismo hay en el Gabinete.

¿El hecho de que Chaves asuma fuertes poderes puede beneficiar a la Comunidad de Madrid?

Lo importante, repito, es el guionista, Zapatero. Y espero que Zapatero termine con su política de discriminación negativa. El Gobierno nos debe 9.000 millones de euros, fruto de no invertir en Madrid. Existe una persecución política hacia nuestra comunidad.

"La integración de Caja Madrid con otras cajas no sería un problema"

Al consejero de Economía no le inquieta que Caja Madrid participe en operaciones de integración con otras cajas. "No supondría un problema político para nosotros", sino que se trataría, defiende, de un asunto puramente económico. "Nosotros no lo veríamos ni bien ni mal, no es una competencia nuestra". Por otra parte, argumenta que la Ley de Cajas que aprobó la Asamblea de Madrid y que ha provocado un enfrentamiento entre el Gobierno autonómico, el Ayuntamiento de Madrid y el Ejecutivo central no es distinta a la de otras comunidades autónomas. Beteta considera una "extralimitación" el recurso que ha presentado recientemente el Gobierno ante el Tribunal Constitucional. Más allá de las familias políticas que alcancen la mayoría en Caja Madrid, el consejero de Economía considera que lo importante es que la entidad mantenga un órgano gestor que sea profesional. "Mi obsesión es llegar a un acuerdo en Caja Madrid", dice.

"Seremos la única región que cumpla el acuerdo de estabilidad"

Como el resto de comunidades, Madrid ha sufrido un severo retroceso en la recaudación tributaria. Sin embargo, Beteta sostiene que Madrid será la única comunidad que "cumplirá con el acuerdo de estabilidad" que fijó el Gobierno para 2008, que contemplaba un déficit del 0,75% del PIB más un 0,25% adicional por inversiones productivas. Que el consejero de Economía sepa cómo cerrará las cuentas de 2008 su comunidad es lógico, más aventurado parece decir que ninguna otra región cumplirá el acuerdo de estabilidad. Beteta se muestra tan seguro por los datos de deuda que publica el Banco de España, donde Madrid, a diferencia de la mayoría de regiones, ha logrado que su deuda no se disparara. Sobre la evolución de las cuentas actuales, los ingresos tributarios se han desviado en 41 millones sobre las previsiones, una cifra "perfectamente asumible" y provocada por la caída en la compraventa de viviendas de segunda mano.

"No hay forma de entender la normativa del ICO"

Si Antonio Beteta en lugar de consejero de Economía fuera ministro, una de las primeras cosas que haría sería modificar la normativa del ICO, que tilda de "abstrusa". Lo que, asegura, impide que el dinero llegue a las empresas.¿Cómo está funcionando Avalmadrid ante la situación de crisis?Desde marzo, ha crecido un 40% su actividad. Sin embargo, por sus estatutos, no puede actuar sobre las grandes empresas. En cualquier caso, ya me gustaría que el ICO funcionara igual de bien.¿No le parece un acierto el fuerte incremento de las líneas de crédito del ICO?Sí, pero los empresarios me dicen que no hay forma de entender la normativa, que es abstrusa. Incluso, el ICO y la Cámara de Comercio de Madrid organizan cursos para aprender a acceder a las líneas de crédito. Esto clama al cielo. Cómo puede ser que empresarios que llevan toda la vida acudiendo al ICO ahora tengan que hacer cursos. Venga Dios y lo vea¿Qué más puede hacer el Gobierno para sortear la crisis?Bajar el impuesto de sociedades. Vamos a liderar una corriente de opinión con el conjunto de la sociedad madrileña para que el Gobierno rebaje el tipo de este tributo, que es una barbaridad y dificulta la recuperación de las empresas madrileñas y españolas.Y desde la Comunidad, ¿planean alguna nueva rebaja fiscal?Nosotros ya hemos hecho los deberes y hemos ido más lejos que cualquier otra comunidad. Ahora es difícil bajar más los impuestos, no por cuestiones recaudatorias, sino legales. No queda casi margen.¿El nuevo modelo de financiación introducirá más capacidad normativa en materia fiscal?Tengo dudas de que se vaya por ese camino. Si el Gobierno da capacidad normativa, optaremos por bajar impuestos y ello obligará a otras regiones a hacer lo mismo, aunque no quieran. Por eso, el PSOE introdujo en su programa electoral ese impuesto mínimo en sucesiones que anda sobrevolando por allí y que no termina de concretarse y que cuenta con el rechazo absoluto de Madrid.

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