El juez declara prescritos los delitos de 'Pepe el del Popular' y el banco recurre
La estafa presuntamente cometida por Pepe, el del Popular ha prescrito. Esa es la postura del Juzgado de Instrucción número 3 de Santander. El banco que preside Ángel Ron recurrirá el auto la semana que viene.
En un giro más propio de una novela de Dashiell Hammett o un relato de Graham Greene, la historia de Pepe, el del Popular inició ayer un nuevo capítulo. Tras estar el acusado 18 años fugitivo de la Justicia con un supuesto botín de 6.000 millones de pesetas (36 millones de euros).
El titular del juzgado de instrucción número 3 de Santander, Fernando Vegas García, indicó ayer que las supuestas irregularidades cometidos por este antiguo director de sucursal habrían prescrito. Sobre José Pérez Díaz -nombre formal de Pepe, el del Popular-, pesaba una acusación de delito continuado de falsedad en documento mercantil y otro de apropiación indebida. El imputado habría cometido estos actos cuando estaba al frente de la oficina número 1 de Banco Popular en Santander, entre 1989 y 1991.
El auto judicial difundido ayer estaba fechado el pasado viernes, 3 de abril y contra él cabe recurso. Una oportunidad que no dejará pasar la entidad perjudicada por las maniobras supuestamente cometidas por José Pérez. El director de servicios jurídicos de Banco Popular, Tomás Pereira, informaba ayer que recurrirán el auto ante la Audiencia Provincial de Santander en los próximos días.
Este jurista estima que el pleito debería resolverse pronto. 'Es más cuestión de semanas que de meses', concretó. Sin embargo, también admitió que esta apelación es el último cartucho del banco para saldar cuentas con su antiguo empleado. 'El trámite muere en la Audiencia Provincial', especificó Pereira.
Estancia en prisión
El responsable del departamento jurídico de Popular estima que, mientras dure el recurso, José Pérez debería seguir recluido en México, país donde fue detenido hace unas semanas.
El abogado de la defensa difiere por completo de esta tesis. 'Espero que salga en cuestión de horas, porque si la causa está prescrita para una persona, cualquier hora que pase en prisión, como se dice en el argot, está pasándola gratis. Pepe lleva veintitantos días recluido cuando este letrado ya le planteó al juez de Santander la cuestión de la prescripción hace un año', explica Juan Carlos Fernández González, representante legal de Pérez Díaz.
En opinión del abogado, el recurso que interpondrá el banco no paralizará la salida de prisión de su defendido. Por otra parte, destacó que su cliente 'está muy satisfecho y, sobre todo, muy emocionado'.
El magistrado encargado del caso estima que los delitos que se imputan a Pérez Díaz tenían un plazo de prescripción de 10 años, según el Código Penal de 1973, vigente cuando se cometieron los actos.
La interpretación del delito de apropiación indebida podría variar si se estima que hubo varios perjudicados en lugar de considerarse que un solo estafado: el propio Banco Popular, que decidió indemnizar a los afectados. No obstante, el Tribunal Supremo no tuvo en cuenta este agravante cuando enjuició al cómplice de Pérez Díaz en 2006.
Pepe, el del Popular, seleccionó a 300 clientes de los 2.000 que tenía su oficina y les ofreció remuneraciones del 12%, superiores a las ofertas de la competencia. Jamás incluyó ese dinero en los libros oficiales. Aprovechándose de que entonces el uso de la informática no estaba generalizado, creó un banco paralelo. Para asegurar el silencio de los propios estafados indicaba que el dinero así invertido era opaco para Hacienda.