Google busca importar a España su negocio de libros online
Quiere alcanzar un acuerdo con las editoriales.
Google busca exportar a todos los países, incluida España, el servicio de comercialización de libros online que va a estrenar en EE UU a través de Google Books. El buscador está en negociaciones con entidades de derechos y editoriales para avanzar en esa dirección, según dijo ayer Luis Collado, responsable de Google Búsqueda de Libros en España. Collado indicó que hasta ahora el mundo editorial español se movía entre la expectativa sobre lo que puede aportar internet y el miedo al cambio, aunque parece que la primera tendencia empieza a imponerse. Y añadió que la web es un escaparate para captar clientes.
Pese al comentario, en España todavía hay divergencias entre las partes. Por ejemplo, el Centro Español de Derechos Reprográficos (Cedro) había recibido hasta principios de marzo 4.433 solicitudes de escritores y otras 291 de editoriales para reclamar una compensación a Google por la digitalización no autorizada de sus obras, tal y como adelantó CincoDías el pasado 5 de marzo.
En cualquier caso, la compañía de internet parece dispuesta a llegar a acuerdos similares al alcanzado en EE UU, país en el que sí tenía abierto un litigio judicial. Bajo el modelo estadounidense, surgido del citado pacto extrajudicial con el mundo editorial (está pendiente de aprobación por el juez), los usuarios de Google Books pueden acceder a una vista previa gratuita de hasta un 20% de la mayoría de las obras descatalogadas que han sido digitalizadas en el programa de afiliación de la empresa. Santiago de la Mora, responsable de Socios Europeos para Libros de Google, dijo que los usuarios de EE UU pueden adquirir y disponer del libro en su totalidad vía online. Al mismo tiempo, Google Books ofrece un servicio de suscripción para instituciones, para que éstas faciliten a sus miembros acceso al texto vía online.
En el caso de los libros protegidos por derechos de autor, los responsables de Google indican que se pueden consultar 'los datos bibliográficos', y añaden que está la posibilidad de redirigir al lector a las bibliotecas más cercanas en la que esté disponible la obra.
El pacto en EE UU abarca a 20.000 editoriales y cerca de un millón de libros. Sus términos contemplan que un 37% de los ingresos sean para Google y el 63% para los tenedores de los derechos. El reparto de este 63% se hace a través de un registro de derechos independiente que 'será administrado por escritores y editores'. En su estrategia de mejorar las relaciones con los autores, en el acuerdo se incluyó una cláusula por la que Google se ha comprometido a pagar 60 dólares a cada autor por cada obra que se haya digitalizado sin permiso.