El plan de carreteras de México se atasca por la crisis financiera
OHL y Global Vía se retiran del concurso de un paquete de 11 autopistas que el Gobierno ha declarado desierto.
Muchos fueron los invitados, pero finalmente no ha habido ningún elegido. El gobierno de México ha declarado desierto el concurso para la explotación de tres autopistas y la construcción de otras ocho en la costa del Pacífico, en las áreas de influencia de Guadalajara, Tepic, Durango y Culiacán. Las infraestructuras licitadas suman 740 kilómetros de peajes, de los que 340 son de nueva creación. Las once iban a ser entregadas a la iniciativa privada por un periodo de 30 años.
La estimación de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (STC) alcanzaba los 700 millones de inversión privada. Pero la coyuntura económica no es la que era y las primeras en bajarse del proceso han sido las empresas españolas.
ACS, Ferrovial, OHL y Global Vía (participada por FCC y Caja Madrid) estaban entre las interesadas, pero las dos primeras ya avanzaron tras el verano que no pujarían por el plan. La razón es que habían extremado la selección de proyectos concesionales a la vista del actual panorama de sequía de financiación.
Las otras dos siguieron adelante y ha sido en la recta final donde se han disculpado por carta a la STC por no presentar oferta.
Quienes si han ido al concurso son las constructoras locales ICA e Ideal, esta última controlada por el magnate Carlos Slim. Pero tampoco lo han hecho en los términos económicos que había marcado el Gobierno en el presupuesto base de licitación.
'El monto ofrecido por los dos concursantes que presentaron oferta al Gobierno Federal refleja el desfavorable cambio de las condiciones de riesgo-entorno en la economía global', reconoce la STC en una nota en la que valora las ofertas económicas como 'inferiores al valor mínimo de referencia establecido para esta licitación'.
Nuevo concurso
La intención de la STC, que mantiene el asesoramiento de Banobras y del Fondo Nacional de Infraestructuras, es revisar el concurso y ajustarlo a las actuales condiciones del mercado. En ningún caso se ha planteado aparcar este proyecto, enmarcado en el Plan Nacional de Infraestructuras presentado en julio de 2007, que las autoridades consideran básico para el desarrollo del país.
La STC, que dirige Luis Téllez, planea volver a lanzar el proceso de licitación antes del verano, pero esta vez lo hará en varios paquetes para reducir el riesgo de los adjudicatarios. El organismo insiste en que la financiación está asegurada a través de los citados Banobras y el Fondo de Infraestructuras.
El Gobierno de Felipe Calderón tiene autopistas en proyecto por más de 17.000 millones de euros, de los que más de 9.000 millones partirán de fondos públicos y el resto debería ser financiado por la iniciativa privada. La fórmula de licitar grandes paquetes de infraestructuras se debe a la necesidad de sacar adelante la totalidad del plan en el mínimo tiempo posible.
En agosto de 2007 ICA y Goldman Sachs se apuntaron por 2.800 millones los 523 primeros kilómetros repartidos en cuatro autopistas. En plena ebullición del negocio concesional, la mexicana se impuso a seis consorcios.