Una industria sin rescate
El Mobile World Congress, celebrado esta semana en Barcelona, ha registrado unos resultados aceptables si se tiene en cuenta la crisis que vive la economía mundial. La organización aseguró que hubo 47.000 participantes y 1.300 exhibidores. Y una coincidencia entre muchos de los presentes: pese al empeoramiento de las cuentas de muchos fabricantes y operadores de telecomunicaciones, 'ésta es una industria que no necesita un plan de rescate como han requerido la automoción o la banca'. Así que la prudencia ha dominado sobre el pesimismo.
El evento ha presenciado una fuerte irrupción de Google en telefonía móvil, una clara apuesta por las tiendas virtuales de aplicaciones y personalización, además de una demostración en firme de que la tecnología para la 4G ya está aquí. Ahora falta impulsar la inversión en estas redes, con tarifas planas móviles reales.