Los ahorros de una vida perdidos de un plumazo

La quiebra de Lehman y la estafa de Madoff han volatilizado el patrimonio de inversores poco diversificados.

Profesores, vendedores, pilotos, ingenieros, médicos, consultores, empresarios, jubilados... la lista de ahorradores afectados por el fraude piramidal de Bernard Madoff o la quiebra de Lehman Brothers es larga. Grandes fortunas y otras no tan grandes desaparecidas de un plumazo. Algunos han visto esfumarse los ahorros de toda una vida, para otros la hucha reservada para la jubilación se ha volatilizado y hay incluso quienes se endeudaron para invertir en algo 'seguro' que hoy ya no vale nada y les deja un crédito por pagar.

LEHMAN BROTHERS

Resulta casi imposible imaginar que un solo inversor de perfil conservador como M. A. se haya visto involucrado en la compra de bonos de Lehman Brothers, deuda del banco islandés Kaupthing y acciones preferentes de Royal Bank of Scotland. Tres fracasos sonados que le han llevado a perder más de la mitad de su patrimonio de un plumazo. Este barcelonés de 59 años, cliente de Popular Banca Privada desde hace más de 20, acudió en 2006 a renovar su cartera de inversiones, hasta entonces totalmente invertida en deuda pública de España. 'Mi agente me convenció para que comprara bonos de Lehman Brothers. Yo prefería unos de Santander, pero él me insistió que las rentabilidades eran mayores', explica. En total, Miquel ha visto cómo se han volatilizado 30.000 euros en bonos del banco estadounidense, entidad que anunció su quiebra a mediados del pasado septiembre, y otros 18.000 euros en deuda del banco islandés Kaupthing, que también corrió esa suerte. Le quedan 32.000 euros en acciones preferentes del Royal Bank of Scotland, entidad que ha recibido fondos del gobierno británico para mantenerse a flote. 'Me siento muy maltratado. Otras entidades han llegado a acuerdos con los afectados'. Desde Popular, sin embargo, aseguran que no tienen ninguna obligación legal de responder a los fondos perdidos.

CNMV

La CNMV ha recordado recientemente que los sistemas españoles de indemnización 'no cubren las pérdidas de valor de una inversión o el riesgo de crédito'. Eso que deja a los perjudicados por la quiebra de Lehman o la estafa de Madoff la opción de reclamar ante las entidades que les vendieron los productos, si consideran que no han recibido un asesoramiento adecuado a su perfil de riesgo. En Lehman, al tratarse de una quiebra, las acciones legales son más limitadas -no era muy previsible una quiebra de este volumen- , mientras que los perjudicados por Madoff pueden alegar falta de diligencia en la gestión de quien vinculó sus ahorros a una sociedad fraudulenta. Aunque, como siempre, la mejor protección es la prevención. No invertir en productos que no se comprenden y diversificar inversiones son recetas para evitar, en la medida de lo posible, sustos.

MADOFF

En España el perfil de los afectados se divide en dos grandes grupos. Por un lado los partícipes de fondos que han visto parte de su cartera expuesta a productos vinculados con Madoff. Son muchos inversores pero la pérdida es limitada. Por otro lado están los clientes de banca privada que accedieron directamente a fondos vinculados casi al 100% a Madoff, fondos gestionados por Optimal, Fairfield o Kingate. Algunos accedieron a estos productos afectados por medio de Santander, que se ha ofrecido a devolver el capital invertido, pero otros lo hicieron a través de entidades como Espírito Santo, Credit Suisse, BNP, Banesto, Fortis, Barclays, HSBC...

¿ACEPTAR O NO?

V. J., un ingeniero jubilado que invirtió 300.000 euros en uno de los fondos de Optimal ha aceptado la compensación de Santander, participaciones preferentes por el valor de la inversión inicial con un cupón anual del 2% y una opción de compra en 10 años. Otros como M. E. aún no tienen claro qué hacer. Este afectado, de profesión consultor de empresas, asegura haber invertido más de un millón de euros en fondos de Optimal. 'Tengo dos alternativas; aceptar con un horizonte de recuperación de la inversión a 10 años, contando además con la posibilidad de obtener liquidez de forma inmediata ya que el banco me ofrece un crédito avalado por la participaciones en condiciones favorables, o no aceptar y poner una demanda que eternizaría la incertidumbre'. Hoy está a la espera de aclarar algunas dudas con el banco como las condiciones exactas del préstamo para decidir.

Una solución a la que inversores como J.C. no pueden acceder. Este médico jubilado invirtió 120.000 euros rescatados de un plan de pensiones en un fondo de Santander, pero comercializado por Banco Madrid. 'A mí no me cubre la oferta de Santander; pero Banco Madrid tiene que responder ante mí. Me dijeron que no tenía riesgo y que era seguro. El gerente del banco me va a recibir, pero temo que no se comprometan', se lamenta. Todavía peor le han ido las cosas a V. I., trabajador del cuerpo de bomberos. Buscaba una inversión segura y Santander le ofreció un fondo que prometía una rentabilidad anual del 7%. V. I., contraviniendo las normas de la inversión prudente, solicitó un préstamo de 600.000 euros que pensaba devolver con los rendimientos obtenidos. Hoy dice haber perdido los ahorros de su vida. La única enseñanza clara para muchos es la de no volver a invertir a crédito y entender bien el producto.

Sólo Santander y National Bank of Kuwait ofrecen compensación

Recuperar el 100% de una inversión perdida es el sueño de muchos inversores afectados por la estafa de Madoff. Santander fue la primera entidad del mundo en ofrecer algún tipo de compensación a algunos de sus clientes afectados, pero no ha sido el único. El National Bank of Kuwait ha decidido reembolsar el 100% del dinero invertido en Madoff por sus clientes, una decisión aplaudida por muchos ya que puede estimular a otros bancos a seguir ejemplo.A diferencia de Santander la indemnización incluye también las rentabilidades acumuladas, no hace distinciones entre inversores y permitirá a los afectados disponer de liquidez inmediata.