Los ingresos fiscales por matriculación caen un 48%
La profunda crisis de ventas que azotó durante el pasado año al sector automovilístico ha golpeado también a la cuenta de ingresos que el Estado obtiene del Impuesto de Matriculaciones.
Durante el pasado ejercicio, la Agencia Tributaria recaudó a través de esta figura fiscal 1.077 millones de euros, lo que supone un descenso del 47,8% respecto a los ingresos obtenidos en el ejercicio de 2007, según los datos recogidos por el organismo recaudador.
Se da la circunstancia de que el año pasado fue el primero en que se aplicó la nueva formulación del Impuesto de Matriculaciones, que modula las cargas fiscales en función de las emisiones contaminantes de los vehículos. De este modo, los automóviles con niveles de emisiones de CO2 inferiores a los 120 gramos por kilómetro quedan exentos de su pago; los que presentan unas emisiones contaminantes de entre 121 y 160 gramos abonan una tasa del 4,75%; entre 161 y 200 gramos, se paga el 9,75%; mientras que los vehículos con emisiones superiores a los 200 gramos por kilómetro son penalizados con un tipo impositivo del 14,75%, al igual que los quads y las motos acuáticas.
Hasta el año pasado el impuesto se estructuraba en dos tramos, en función de la cilindrada. Los vehículos con un cubicaje inferior a 1.600 cm3 pagaban un tipo del 7%; mientras el resto abonaba un 12% del precio de compra.
Según las organizaciones sectoriales, la reforma fiscal beneficiaría a más de un millón de conductores y generaría un ahorro de entre el 2,25% y el 7%. España está entre los países de la UE donde menos impuestos se pagan por automóvil, 11.000 euros en toda su vida útil, según un informe de CC OO.
Pagan los grandes
La depresión de ventas del sector hace difícil calibrar el efecto de la reforma del Impuesto de Matriculaciones. Aun así, se aprecia cómo con sólo el 10% de las ventas, los vehículos de mayor cilindrada (más contaminantes) generan el 40% de los ingresos.