El rey Midas chino del aluminio
Dicen que es un hombre 'ambicioso, competitivo y despiadado'. Una ambición que le ha llevado a convertirse en una figura clave de la industria minera. Xiao Yaquing, presidente del gigante del aluminio Chinalco, ha dado un golpe de mano al cerrar una inversión de 19.500 millones de dólares (15.215 millones de euros) en el gigante del sector: Río Tinto.
A sus 50 años, Xiao se ha convertido en uno de los ejecutivos más conocidos de China. Un país donde los responsables de las rígidas empresas estatales tienen como norma pasar desapercibidos. Un perfil bajo que suele ir acompañado de un sueldo mucho menor al que consiguen sus homólogos internacionales.
Sin embargo, Xiao es popular en China por su agresividad al frente de Chinalco, reflejada en el impulso que bajo su dirección ha dado a las adquisiciones, tanto dentro como fuera de su mercado doméstico. Unas operaciones con las que persigue convertir a la compañía estatal en uno de los principales actores internacionales de su sector. Durante sus cuatro años de presidencia, el beneficio de Chinalco ha crecido un 65%, hasta más de 1.150 millones de euros.
Ayer dio un nuevo paso en esa dirección. Su compañía pactó la inyección de liquidez a Río Tinto -empresa de la que es el principal accionista, con el 9% del capital- y él ha sido el cerebro de la operación. Pero este movimiento no sólo le permite ganar protagonismo, sino también mejorar su acceso a materias primas como el cobre o el hierro.
El presidente de Chinalco forma parte de la primera generación de directivos chinos nacidos después de la Revolución del gigante asiático. Desde el principio, su carrera ha estado enfocada a la industria minera. Tras graduarse en el Instituto de Minería y Metalurgia de Changsha, en la provincia de Hunan, le asignaron dar sus primeros pasos profesionales en Northeast Light Aluminium.
Allí estuvo 17 años. Consiguió ir escalando posiciones desde su puesto inicial de ingeniero hasta hacerse cargo de la gestión. Una evolución que le permitió dar el salto profesional a la presidencia de su principal competidor, también estatal, Southwest Aluminium Group.
En esta compañía asumió además el cargo de consejero delegado, desde el que supervisó su integración en Chinalco. Sin embargo, tuvo que esperar cuatro años para hacerse con el control total del grupo minero. Fue en 2004 cuando alcanzó la presidencia. Aunque el salto internacional no lo dio hasta hace un año cuando, junto a Alcoa, entró en el capital de Río Tinto. 'æpermil;sta es nuestra mayor operación adquisición fuera de China pero, definitivamente, no será la última', recalcaba entonces.
Sin embargo, sí que puede ser la última con su rostro al frente de la multinacional china. La rumorología apunta un inminente cambio en la cúspide directiva de Chinalco. En concreto, las especulaciones auguran su salida de la compañía y su paso a otro puesto estatal, aún por desvelar. De hecho, ya hay quien sitúa a Xiao Yaquing en la esfera política. Según el diario de Hong Kong Ming Pao Daily, Xiao podría convertirse en el próximo vicesecretario general del Consejo de Estado Chino.
Además, su previsible salida de la empresa se ha convertido en tema de controversia. Mientras Chinalco ha llegado a confirmar las informaciones que adelantaban su marcha, su división en Bolsa, Chalco (donde Xiao también ejerce como presidente), negaba esta posibilidad. Eso sí, dejaba la puerta abierta a cambios en su consejo de administración, así como en su cúpula directiva.
De confirmarse el cambio, Chinalco ya tendría sustituto. Se trataría de Xiong Weiping, quien fue presidente de la cotizada Chalco de 2004 a 2006, cuando pasó a ocupar la vicepresidencia y la dirección general de China Travel International Investment.