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Banqueros y cajeros en la pasarela (AEB, CECA, CEOE y Cepyme lucen modelo en Las Cortes)

Se aproxima la semana de la moda en la economía. Banqueros, cajeros y empresarios lucirán sus modelos en la pasarela del Congreso de los Diputados. También lo harán las patronales y los sindicatos. Un espectáculo inédito, que puede ser tan saludable como inquietante.

Las autoridades económicas, el gobernador el Banco de España y el presidente del Instituto de Crédito Oficial irán en representación pública. ¿El objetivo? Dar su visión sobre cómo están las cosas en la economía y sus recetas para salir de la crisis. Hasta aquí, ninguna novedad. Es lo que vienen haciendo habitualmente como representantes públicos, bien sea para presentar los Presupuestos Generales del Estado o en otras circunstancias.

Pero la gran novedad de la temporada, el último grito, es que por la pasarela de la Comisión de Economía del Congreso va a desfilar una amplia representación privada en una semana de la moda económica que va a durar por lo menos dos meses. Los banqueros de la AEB, los cajeros de la CECA, los empresarios de la CEOE y de la Cepyme, los autónomos…

Todos van a lucir sus galas en un escenario inédito. De nuevo, España es diferente. Es la primera vez que un Parlamento de nuestro entorno organiza un sarao de estas características y todos los representantes políticos lo saludan con alegría, como los habitantes de Villar del Río a los americanos. Sólo unos pocos fruncen el ceño porque querrían más nivel, dicen que no estarán los top, top de la economía nacional.

Así que, qué bien. Ya casi somos como los americanos de Berlanga. Tendremos a los empresarios privados desfilando por el Parlamento.

Sin embargo, Villar del Río aparte, hay que tener mucho cuidado. Porque, vamos a ver, las Cortes están ahí para legislar y para controlar a Gobierno. Más concretamente, “ejercen la potestad legislativa del Estado, aprueban sus Presupuestos, controlan la acción del Gobierno y tienen las demás competencias que les atribuya la Constitución”. Y, entre estas últimas no consta la fiscalización de la gestión de las empresas privadas.

O mucho me equivoco, o vamos a ver a más de un diputado decirle a los empresarios, a los banqueros y a los cajeros cómo tienen que hacer su trabajo --también se lo dirán a los sindicatos, pero estos ya están más acostumbrados a la política--.

Y ese es el peligro. Que sus señorías lleguen a pensar que están haciendo su trabajo por fiscalizar al sector empresarial privado. Y no es así. Sus señorías lo que tiene que hacer es buenas leyes, y diseñar un buen marco en que las empresas pueda crecer y crear empleo. Lo demás es muy pintoresco y, aparte de a unos juegos florales, si hay suerte asistiremos a alguna que otra bronquita en sede parlamentaria, que siempre da juego en el partido.

Pero que no se engañen ni nos engañen. Así los parlamentarios no están haciendo su trabajo.

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