La crisis lleva a los cinco grandes de la banca a reducir su beneficio un 18,5% en 2008
Los cinco grandes de la banca (Santander, BBVA, Caja Madrid, La Caixa y Banco Popular) alcanzaron un beneficio neto conjunto de 17.590 millones de euros en 2008, lo que supone un descenso del 18,5% respecto a los 21.595 millones registrados en 2007, según datos de las entidades.
La crisis no ha pasado de largo por las entidades españolas, cuyos resultados reflejan que la delicada situación económica y financiera a nivel internacional ha afectado a su negocio. Pese a ello, los cinco grandes de la banca lograron presentar resultados positivos.
En este marco, el Santander continúa liderando el ránking de beneficios, ya que logró un resultado de 8.876 millones de euros, con un descenso del 0,2%, respecto a los 9.060 millones de 2007.
Aunque la entidad no pudo alcanzar los 10.000 millones previstos para el ejercicio, el beneficio ordinario recurrente, aquel que no incluye las partidas extraordinarias, repuntó un 9,4% respecto al registrado en 2007, que fue de 8.111 millones.
A continuación se situó BBVA, que registró un beneficio neto de 5.020 millones de euros, con descenso del 18% respecto al resultado obtenido en el mismo periodo del ejercicio anterior.
El banco explicó que estas cifras estuvieron influidas por los resultados de carácter extraordinario, que restaron 395 millones al beneficio en 2008, resultado de los ingresos de 509 millones por la venta de la participación en Bradesco, menos 602 millones de provisiones por prejubilaciones extraordinarias en España y 302 millones de euros de dotación extraordinaria por la estafa Madoff. De esta forma, sin considerar las partidas singulares, el beneficio recurrente de la entidad creció un 0,2%.
El tercer lugar fue para La Caixa, que colocó el beneficio neto atribuible en 1.802 millones, con un recorte del 27,6%, aunque su beneficio recurrente subió un 2% y se situó en 2.052 millones. La entidad destacó que durante el pasado ejercicio se llevaron a cabo provisiones por valor de 1.031 millones de euros, así como una dotación extraordinaria de 357 millones.
Banco Popular, por su parte, registró un beneficio neto atribuible de 1.052 millones de euros en el ejercicio 2008, lo que supone un descenso del 16,8% respecto al obtenido el año anterior.
La entidad que preside Angel Ron explicó que este resultado refleja una anticipación voluntaria de provisiones por deterioro de activos de 189 millones de euros y la no utilización de provisiones genéricas por 244 millones de euros, pese a estar permitidas por la normativa actual. Excluyendo estas aportaciones, el beneficio fue de 1.346 millones de euros, un 6,4% más alto que el de 2007.
En quinto lugar se colocó Caja Madrid, que anunció hoy un beneficio neto atribuido de 840 millones de euros en 2008, lo que representa un descenso del 70,6% respecto al histórico resultado de 2.860 millones de euros de 2007, cuando contabilizó el impacto generado por las plusvalías obtenidas en la venta de Endesa (2.333 millones de euros) y otros extraordinarios (OPV Realia). El beneficio recurrente alcanzó los 960 millones de euros, un 5,6% más que en 2007.
Morosidad por encima del 2% en todas las entidades
Las principales entidades españolas registraron un considerable aumento de la tasa de morosidad, tal como se esperaba, que en todos los casos se situó por encima del 2%. No obstante, Santander no ha dado todavía sus cifras correspondientes a este apartado.
Caja Madrid contó con el mayor porcentaje de dudosos sobre el total de créditos, ya que se situó en el 4,87% de la cartera, lo que supone multiplicar por más de cinco la tasa del 0,9% que registraba al cierre de 2007.
A continuación se situó Banco Popular, con una tasa de morosidad del 2,81%, que fue más de tres veces superior la tasa registrada al cierre del ejercicio 2007. La Caixa, por su parte, situó la tasa de mora en el 2,48% de su cartera crediticia, con lo que fue casi cinco veces más alta que la registrada un año atrás, cuando se colocó en el 0,55%.
Por su parte, BBVA era la entidad que contaba con una tasa de morosidad más baja, que se duplicó en 2008 y alcanzó el 2,12%, frente al 0,89% registrado a 31 de diciembre del año 2007.