Aguirre advierte a Blesa que no puede adaptar la ley de cajas 'parcialmente'
El consejo de Caja Madrid no llega a un consenso en los nuevos estatutos
El presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, presentó ayer al consejo de administración unos estatutos edulcorados. Estos incorporan la Ley de Cajas promovida por Esperanza Aguirre, pero sin restar peso político a Alberto Ruiz-Gallardón. Aguirre se opone a la adaptación parcial.
La reunión celebrada ayer en Toledo por los 21 consejeros de Caja Madrid terminó con mucha tensión. El presidente de la entidad, Miguel Blesa, informó (sin someterlo a votación) del contenido de los nuevos estatutos de la caja, después de adaptarlos a la nueva ley autonómica, en vigor desde el 1 de enero.
El resultado no obtuvo el consenso del máximo órgano de gobierno. Los estatutos se adaptan a la nueva Ley de Cajas, pero también introducen el espíritu de la Lorca, de ámbito nacional, a fin de permitir que el Ayuntamiento de Madrid pueda tener más peso político en el sector de municipios del fijado por Aguirre.
El nuevo texto de los estatutos dice: 'no podrá corresponder a ninguna corporación local más del 30% de los consejeros generales'. Con esta redacción híbrida se deja abierta la puerta a que Ruiz-Gallardón mantenga el número actual de consejeros. Con la ley anterior, su peso político llegaba hasta 70% del sector de municipios.
Además, se modula la ponderación entre el número de clientes y los depósitos, para que la nueva ley no sobrevalore a los municipios con mayor poder adquisitivo respecto de los más poblados.
Sin embargo, la Comunidad de Madrid, a través de la Consejería de Economía y Hacienda, advierte de que Blesa 'no puede adaptar parcialmente la ley'. En este sentido, también explican que la disposición transitoria cuarta de la Lorca estableció en 2003 que después adaptar la norma nacional será la ley autonómica la que marque las reglas de juego de la entidad.
El vicepresidente del gobierno regional, Ignacio González, llegó incluso a ser más contundente: 'Estoy seguros de que el consejo de Caja Madrid hará lo que tiene que hacer, que es cumplir con la legislación vigente', manifestó. 'Si no, lógicamente, la administración de la Comunidad Autónoma, como órgano tutelante, se encargará de que se cumplan las determinaciones legales, procederá a la adaptación de los estatutos y su resolución tendrá carácter ejecutivo'.
Los 15 días de la Consejería de Economía
Los nuevos estatutos de la cuarta entidad financiera, sin embargo, no están cerrados del todo. Miguel Blesa los tendrá que enviar antes del 31 de este mes a la Consejería de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid. El consejero de la misma, Antonio Beteta, cuenta con 15 días para dar su visto bueno o bien para reformarlos, porque cuenta con esa competencia. Desde ese momento, el consejo de Caja Madrid tendrá un plazo de un mes otra vez para reunirse y votarlos. Ayer mismo, el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, apelaba a la independencia de la entidad. 'Una cosa es que el sistema de incorporación de la entidad venga motivado por la participación de los ayuntamientos, Comunidad de Madrid y distintas entidades, y otra, que cuando se ejercen tienen que ser en beneficio de ciudadanos e impositores'.