Iberostar reduce sus inversiones en su incipiente negocio inmobiliario
Iberostar Hotels, empresa hotelera de la familia Fluxá, anunció el pasado año que apostaría por el segmento inmobiliario con su filial Iberostate.
Entonces, su consejero delegado, José Antonio González, anunció una inversión de 1.000 millones para los próximos cinco años para desarrollar varios complejos de promoción residencial en Brasil, República Dominicana, México, Pacífico y Marruecos. Hoy por hoy y ante la crisis del entorno, González reconoce que las inversiones serán menores y que esté año sólo invertirá 100 millones de euros, frente a los 300 previstos. 'Hemos pensado llegar a tener tres proyectos inmobiliarios (dos en Caribe y uno en Marruecos)', en una primera fase. También reducirá el ritmo de las construcciones. En un principio, el grupo tenía pensado levantar entre 100 y 200 unidades por cada complejo, pero empezaremos por 50, 'a ver cómo se comporta el mercado', señala González.
Si todo va bien, el grupo estima que construirá en el futuro un total de cinco complejos residenciales con una media de 500 unidades.
En cuanto a su cadena hotelera, Iberostar espera abrir entre seis y diez hoteles al año. En 2009, inaugurará nueve establecimientos, pero en lugar de ser en propiedad, como hasta ahora, alternará diferentes modelos de explotación para no exponer tanta inversión (alquiler, gestión y propiedad compartida con socios).
Abrirá en Grecia, Montenegro, Turquía, Marruecos, Cabo Verde y Cuba. También reforzará su línea de lujo, con su marca de hoteles exclusivos, The Grand Colletion. Acaba de inaugurar el hotel El Mirador en Tenerife, que se incluye en este portfolio de activos de gama alta.
La cifra
15 millones de euros invertirá Iberostar en la reforma de sus establecimientos este año. En el año 2008 la cadena ingresó 808 millones, un 3,5% más.