Microsoft e Intel suman 11.000 despidos a la lista negra del sector tecnológico
Los rumores ya se hacían oír hace semanas, pero la confirmación oficial llegó ayer: Microsoft anunció unos resultados trimestrales inferiores a los previstos y, en consecuencia, el recorte de 5.000 empleos en todo mundo en los próximos 18 meses, 1.400 de ellos inmediatamente.
La multinacional desveló ayer que su beneficio neto en el último trimestre de 2008 bajó un 11,3% respecto al trimestre anterior, hasta 4.170 millones de dólares (3.225 millones de euros). El gigante estadounidense cerró el trimestre con unos ingresos de 16.629 millones de dólares (12.850 millones de euros), lo que supone una subida del 1,6% respecto al mismo periodo del año anterior, pero por debajo de los 17.082 millones esperados por el mercado. La firma sufrió el principal revés en su división Client, donde se engloba el sistema operativo Windows, cuyos ingresos cayeron un 8%. La empresa no se atrevió a dar previsiones para el resto del año por la volatilidad del mercado. Tras el anuncio, las acciones de Microsoft cayeron cerca de un 10%.
Su consejero delegado, Steve Ballmer, señaló en un comunicado que la compañía 'no es inmune' a la crisis económica, pero se mostró confiado en la 'solidez' de los productos y en la estrategia de negocio. 'Continuaremos dirigiendo nuestros gastos e invirtiendo en oportunidades a largo plazo para lograr valor para nuestros clientes y accionistas, y saldremos más fuertes de lo que somos hoy'.
La reducción del 5% de la plantilla (que hoy ronda los 96.000 empleados) supondrá un ahorro de 1.500 millones de dólares y representa el primer gran recorte de empleo de la firma fundada por Bill Gates. La empresa informó también que va a eliminar los aumentos basados en el mérito de los trabajadores y a reducir los costes de los viajes de sus empleados y de las acciones promocionales para disminuir los gastos.
También Intel, el fabricante de chips más grande del mundo, anunció ayer el cierre de cinco fábricas y un ajuste que comprende a la eliminación de 5.000 a 6.000 puestos de trabajo para ajustar su capacidad de producción a las actuales condiciones del mercado.
El crac financiero pasa así factura al sector tecnológico que, en poco más de una semana, ha sumado casi 40.000 despidos en todo el mundo. En la lista negra de corporaciones más afectadas están Motorola, Google, Ericsson, TDK o Sony.