El Ibex sucumbe al pesimismo y pierde casi 700 puntos en cinco jornadas
El Ibex ha podido presumir del mejor arranque de año desde 2003 y llegó a anotarse un 5,74% en tres días. Pero el optimismo ha dado paso a la cruda realidad y, tras perder 666,7 puntos en cinco sesiones, ya retrocede un 1,51% en 2009.
El sueño de un rebote de mayor intensidad ha terminado. 'Las noticias económicas y empresariales son desalentadoras. Es posible que asistamos a una recuperación hacia mediados de año, pero todavía es pronto para pensar en eso', según Natalia Aguirre, de Renta 4.
Ayer, el Ibex retrocedió un 1,55%, hasta los 9.057.3 puntos, de manera que pierde un 6,86% - 666,7 puntos- desde el cierre del pasado jueves. Los principales culpables del descenso de ayer fueron el Santander (-3,36%), BBVA (-3,95%) y Telefónica (-1,51%), aunque hubo varias compañías que sufrieron retrocesos superiores al 3%, como BME (-3,86%), Banco Sabadell (-3,35%), Sacyr (-3,14%), Banco Popular (-3,11%) y OHL (-3,03%).
El cierre, aunque malo, pudo ser mucho peor, ya que en torno a las 11 de la mañana el Ibex retrocedía más de un 3% y perdía la cota psicológica de los 9.000 puntos. 'Se encuentra inmerso en un rango lateral comprendido, en su parte baja, en torno a los 8.800 puntos, con un techo entre los 9.700 y los 9.800 puntos', señala Ignacio Cantos, de Atlas Capital.
'El mercado está muy nervioso, y aunque ya puede pensarse en ir comprando de cara al largo plazo, todavía no esperamos una recuperación sostenida', señala Beatriz Catalán, de Ibercaja Gestión.
La tendencia a la mejoría de Wall Street, después de una apertura bajista, intercedió por los parqués del Viejo Continente, que finalizaron con descensos situados entre el 1,75% del Dax alemán y el 0,61% del Ftse británico.
Al otro lado del Atlántico, la Bolsa apenas osciló. El Nasdaq ganó un 0,5% y el S&P 500, un 0,18%. Eso sí, el Dow Jones retrocedió un 0,3% y el pesimismo sigue presente entre los inversores. 'La temporada de resultados del cuarto trimestre ha comenzado en Estados Unidos, y hay miedo a que sean peores de lo esperado', advierte Jesús de Blas, de Crédit Agricole-Mercagentes.
Después de que Alcoa desatara el desánimo el lunes, al publicar sus primeras pérdidas trimestrales en seis años, Intel se dispone mañana a dar sus cuentas tras el cierre de la sesión, y los expertos esperan una fuerte caída.
Las últimas previsiones recopiladas por Thomson Reuters apuntan a que los beneficios de las firmas del S&P 500 caerán un 15% en el trimestre, cuando en octubre auguraban un subida cercana al 50%.