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Fin de las conversaciones

La Caixa descarta la venta a Lukoil de su paquete de Repsol

La Caixa ha descartado la venta de su participación en Repsol a Lukoil, con lo que la entrada del grupo ruso en la petrolera española previsiblemente quedaría limitada a la compra del paquete de Sacyr y de algún otro accionista minoritario, según informó el diario El País el pasado sábado, citando fuentes de la entidad catalana.

Esto supone un giro en la posición de la entidad financiera, que el pasado 21 de noviembre manifestó que estaba en conversaciones con Lukoil sobre el futuro de su participación en el capital de Repsol -14,3% directo e indirecto-. La Caixa y Criteria -holding de participadas en el que tiene una posición mayoritaria- estaban dispuestas a vender dentro de un acuerdo con la constructora Sacyr Vallehermoso, que está buscando un comprador para su participación del 20%.

'No vendemos. No lo haremos, no vamos a ir de la mano de Sacyr en esta operación', dijeron las fuentes no identificadas de La Caixa por El País. Uno de los temas que ha empujado a este cambio de actitud es evitar que su salida, total o parcial de la petrolera, fuese interpretado como un acción concertada en perjuicio de los accionistas minoritarios que, a través de algunas asociaciones, han comenzado a reclamar el lanzamiento de una opa en caso de un acuerdo de los socios de referencia con el grupo ruso.

Pero también la polémica política que se ha desencadenado a raíz de salir a la luz estas negociaciones podrían pesar en la postura de La Caixa que, por otro lado, tiene que buscar una solución a su participada Gas Natural, que controla junto con Repsol, en caso de un cambio de accionariado relevante en el capital de la petrolera.

Mientras, Sacyr, pese a estar menos presionada tras la venta de Itínere, sigue buscando una solución más radical que le permita reducir su deuda financiera, que bajará tras la citada operación a 12.476 millones de euros desde 19.726 millones.

Financiación

El pacto con los bancos acreedores de Sacyr para la compra del 20% de Repsol es otro de los obstáculos para la entrada del grupo ruso, así como el precio. Lukoil no parece ahora dispuesto a pagar 26,7 euros por acción reclamados por la constructora.

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