La banca española exige claridad en las inyecciones de capital público de sus rivales
La banca española no está conforme con el principio de acuerdo anunciado la semana pasada por la comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, ante las distintas recapitalizaciones bancarias con capital público. Cree que las medidas no son transparentes. Asegura que en algunos casos el coste de las inyecciones por parte de los Estados se está realizando por debajo de su coste de mercado, 'lo que puede considerarse subvenciones encubiertas', señala un alto ejecutivo del sector.
La lista de banqueros españoles que critican las desventajas que pueden ocasionar para las entidades la recapitalización de los bancos europeos por parte de los Gobiernos es larga. Su idea es intentar que estas medidas perjudiquen lo menos posible a la compentecia. Para ello están intentado influir en algunas de las decisiones de la CE ahora verbalmente, pero reconocen que barajan hacerlo por escrito. De momento, mantienen contacto permanente con los parlamentarios españoles en Bruselas y con otras asociaciones y comisarios de la CE. Y es que el principio de acuerdo anunciado la semana pasada por Kroes no ha convencido al sector nacional, prácticamente el único de la UE que no ha necesitado inyecciones públicas en su capital.
'Es cierto que el último documento ha mejorado en algo al inicial. El tono del acuerdo está más de acorde a nuestras reclamaciones. Se ha avanzado algo ya que admiten que se puede producir una distorsión en la competencia al entrar los Gobiernos en el capital de la banca. Debe establecerse una temporalidad en estas medidas. Estas ayudas excepcionales deben finalizar'. æpermil;sta es la opinión de un alto ejecutivo de un gran banco, que participa en el análisis de lo que se debe o no pedir a Bruselas. Pese a considerar el documento anunciado por Competencia más acorde con los intereses españoles, este ejcutivo, como los del resto del sector, quieren respuestas más contundentes de la CE para evitar desventajas competitivas entre los bancos en los que el Gobierno es su mayor accionista y los que no necesitan recurrir al capital público.
La AEB afirma que la respuesta de la Comisión al problema que plantea estas recapitalizaciones no es una contestación transparente. Cree que Bruselas está mezclando y confundiendo dos objetivos diferentes: uno es el reto de estabilidad financiero y otro el del crecimiento del crédito, asegura un portavoz de la patronal bancaria. Y añade que la CE no distingue entre ayudas que se están dando para salvar los sistemas financieros y las que se otorgan para reactivar la economía. Mantiene que en esta confusión, algunos Estados están dando ayudas con el argumento de facilitar la concesión de créditos cuando lo que hacen es 'salvar a los bancos que están quebrados'. Otras peticiones son que los banco con capital público no repartan dividendo, y que estás inyecciones de fondos del Gobierno vayan acompañadas de de un plan de reestructuración, como reducción de su balance, su fusión, y otras medidas de saneamiento.
Reclaman también que se clarifiquen las condiciones en qué se están capitalizando ciertas entidades para conocer si estas ayudas son o no subvenciones encubiertas. Fuentes de la banca asegura que en algunos casos el coste del capital que se está facilitanto a los bancos por parte del Estado 'está por debajo de su coste de mercado', señala un directivo del sector. Tampoco olvidan pedir que si es necesario modificar los estándares de capital, como algunos países defienden, éstos deben hacerse a través de una directiva. 'Esta es la forma más transparente', dice otro ejecutivo.
Plan de rescate de Irlanda
El Gobierno de Irlanda ha lanzado un plan de rescate de hasta 10.000 millones de euros dirigido a recapitalizar a sus entidades bancarias. La operación se realizará mediante la compra de acciones preferentes y comunes de los bancos, confirmó el Departamento de Finanzas de Irlanda. La medida pretende garantizar la sostenibilidad a largo plazo del sector bancario irlandés, así como apuntalar su contribución a la economía a través de la puesta a disposición de crédito tanto para las empresas y consumidores. 'Esta iniciativa ayudará a promover y animar el flujo de fondos a la economía, limitando el impacto para las empresas y consumidores de las dificultades del mercado financiero', añadió. El Gobierno indicó que probablemente llevará a cabo este programa de recapitalización a través del Fondo Nacional de Reserva de Pensiones, bajo una serie de plazos y condiciones, por lo que la norma reguladora de este fondo deberá ser reformada.