_
_
_
_
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

La CNC y la competencia en las 'telecos'

El proceso de apertura y liberalización del sector de las comunicaciones electrónicas ha venido enmarcado en Europa en un contexto normativo en constante evolución, subraya el autor. Y en este sentido, la introducción de la regulación 'ex ante' es, en su opinión, uno de los elementos más destacables de esta dinámica

Es difícil exagerar la relevancia que el continuo desarrollo de las tecnologías de la comunicación tiene para la inversión, la creación de empleo y el crecimiento de la productividad en Europa y en el mundo. Las modernas redes y servicios de comunicaciones electrónicas constituyen el elemento fundamental sobre el que se construye la sociedad de la información, que está cambiando día a día la naturaleza de las relaciones sociales y de la actividad económica. Las tecnologías de la comunicación y de la información son hoy parte integral de prácticamente cualquier otro sector de la economía, abriendo nuevas posibilidades para todo tipo de industrias, así como para ámbitos como la medicina, la enseñanza o la propia Administración.

En Europa no cabe concebir todo este desarrollo, los crecientes niveles de inversión y el mayor grado de competencia, que ha proporcionado más opciones a los consumidores y las empresas y mejores servicios a mejores precios, sin el proceso de progresiva apertura y liberalización del sector de las comunicaciones electrónicas. Este proceso ha venido enmarcado en un contexto normativo europeo en constante evolución, con los sucesivos paquetes de comunicaciones electrónicas, que han tenido como objetivo precisamente la liberalización, la armonización de las diferentes normativas e impulso del mercado interior de los servicios de comunicaciones electrónicas, y una decidida apuesta por el aumento de la competencia.

Uno de los elementos más destacables de toda esta dinámica es la introducción de regulación ex ante en todos aquellos mercados pertinentes de productos y de servicios dentro del sector de las comunicaciones electrónicas en los que se identifique, por parte de las autoridades nacionales de regulación (la CMT en el caso español), la existencia de operadores con poder significativo de mercado.

En la actualidad, tras la publicación en diciembre de 2007 de la nueva recomendación de la Comisión Europea sobre mercados pertinentes, de acuerdo con el procedimiento establecido en la Directiva Marco de Comunicaciones Electrónicas (y recogido en la legislación española en la Ley 32/2003 General de Telecomunicaciones y normativa que la desarrolla), nos hallamos en proceso de revisión de los análisis de mercados de referencia.

La Comisión Nacional de la Competencia (CNC) participa en este proceso a través del preceptivo informe sobre la propuesta de análisis de la CMT (artículo 3 del Reglamento sobre Mercados de Comunicaciones Electrónicas). Y ello deriva de que la regulación sectorial ex ante y la aplicación horizontal de la normativa sobre defensa de la competencia son instrumentos complementarios con un fin común: preservar la competencia en los mercados en beneficio de los consumidores, objetivo último de la CNC. Como la propia normativa comunitaria contempla, el objetivo del marco regulador es ir reduciendo la regulación sectorial ex ante a medida que se desarrolle la competencia en el mercado.

La regulación ex ante debe aplicarse en aquellos casos en los que se detecten estructuras de mercado con obstáculos a la competencia, en las que no se dan las condiciones para que el mercado tienda por sí mismo a la competencia efectiva, y en que además la mera aplicación de la legislación sobre competencia no permite hacer frente de manera adecuada a los fallos del mercado en cuestión.

El propio éxito en su actividad de las autoridades sectoriales como la CMT, y de la política de liberalización y apertura, a medida que permite que se consoliden estructuras de mercado más competitivas, propicia que la regulación vaya dando paso a la aplicación de la normativa de competencia como principal garante del funcionamiento del mercado, allí donde antes actuaban de forma conjunta.

El hecho de que la nueva recomendación de la Comisión Europea sobre mercados pertinentes reduzca el número de mercados susceptibles de regulación, de los 18 contemplados anteriormente a tan sólo 7, es una evidencia de esta realidad.

La CNC ha estado siempre activa en la defensa de la competencia en los mercados de comunicaciones electrónicas, y en mercados conexos como el audiovisual, ya sea en la lucha contra las prácticas anticompetitivas -como demuestran los numerosos expedientes, algunos aún en periodo de instrucción- o en sede de control de concentraciones.

La eliminación de la regulación ex ante en mercados tan significativos como, por ejemplo, los de tráfico telefónico desde una red fija, supone un reto adicional, pero nuestra institución está preparada para hacerle frente. La especialización sectorial en el seno de la Dirección de Investigación facilita un mayor conocimiento de la problemática de los distintos sectores, como el de comunicaciones electrónicas, y nos hemos dotado de los medios necesarios para asumir nuevas responsabilidades.

Los operadores pueden tener la certeza de que continuaremos vigilantes y dispuestos a actuar, y los consumidores la seguridad de que redoblaremos, si cabe, nuestros esfuerzos en pro de la competencia en estos sectores, vitales para el funcionamiento del conjunto de nuestra economía.

Francisco J. Garzón. Subdirector de la Sociedad de la Información de la Comisión Nacional de Competencia (CNC)

Archivado En

_
_