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Comercio exterior

El desplome de las importaciones modera el déficit comercial

El déficit de la balanza comercial (que mide la diferencia entre exportaciones e importaciones de bienes y servicios) en España se situó en 74.544 millones de euros en el acumulado entre enero y septiembre, lo que representa un incremento del 4,8% en tasa interanual.

Es el crecimiento más bajo de los últimos cinco años, aunque la consecución de este hito no se ha alcanzado por el mayor vigor exportador de la economía española, sino por el desplome de las importaciones.

La aceleración de la crisis económica en España ha provocado una brusca caída del consumo (tan sólo creció un 0,1% en el tercer trimestre) y en consecuencia un fuerte descenso de las compras de las empresas al exterior. En los nueve primeros meses de 2008, las importaciones crecieron un 6,6%, el nivel más bajo de la serie histórica (que comienza en 2004), lo que muestra el frenazo que han experimentado las compras de bienes y servicios.

Y el mejor exponente de este enfriamiento se encuentra en la caída registrada por los sectores de bienes de equipo y automoción, que suponen una tercera parte de las importaciones españolas y cerca del 40% de las ventas al exterior. Tradicionalmente, las empresas españolas de ambos sectores compran los componentes a otros países, en especial a los socios de la zona euro, para montarlos en sus plantas y posteriormente exportarlos al extranjero. Sin embargo, la fuerte desaceleración económica en todos los países de la zona euro, incluida España, ha cambiado por completo esa tendencia.

En los nueve primeros meses del año, las compras de componentes para el sector del automóvil han descendido un 11,7% (3.147 millones de euros en términos absolutos) y las de bienes de equipo han caído un 0,7% (335 millones).

Estas bajadas, provocadas por la caída en las matriculaciones de vehículos y el recorte en los pedidos a la industria de los socios de la zona euro, se han traducido a su vez en un menor crecimiento de las ventas al exterior.

De este modo, las ventas de bienes de equipo al exterior crecieron sólo un 1,4% entre enero y septiembre, cuando en el mismo periodo de 2007 lo hacían a un ritmo del 5,3%. Algo similar ha ocurrido con las exportaciones de automóviles y componentes, que se han incrementado un 4%, 1,6 puntos porcentuales menos.

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