El ministro de Finanzas alemán reconoce que el país ha entrado en recesión
El ministro alemán de Finanzas, Peer Steinbrück, reconoció hoy que Alemania se encuentra en recesión, pero mantuvo para 2009 sus previsiones que parten de un ligero crecimiento del 0,2%.
"Sí, Alemania está en recesión", dijo Steinbrück durante la primera jornada del debate sobre los presupuestos del Estado para el año 2009, y añadió que sería equivocado seguir hablando de un estancamiento.
La Oficina Federal de Estadística confirmó hoy sus datos provisionales de comienzos de noviembre, según los que Alemania registró en el segundo trimestre un retroceso económico del 0,5 trimestre, lo que, unido a la contracción del 0,4% experimentada en el segundo trimestre, conduce a una recesión técnica.
Steinbrück reconoció que nadie en estos momentos sabe cuán profunda ni prolongada acabará siendo la recesión.
En el debate, en que también se abordó el paquete de impulso coyuntural aprobado recientemente por el ejecutivo, el ministro criticó a los políticos que desde fuera y dentro de la coalición gubernamental están pidiendo ya nuevos programas.
También desmintió que el gobierno esté ya estudiando ofrecer vales de compra por valor de 500 euros para los 30 millones de empleados, como asegura el diario económico "Handelsblatt" en su edición de hoy.
Según el rotativo, que basa sus informaciones en fuentes del gobierno, el Ejecutivo estaría preparando el reparto de estos cupones para el caso de que "los instrumentos acordados no sean suficientes" y haya que respaldar la coyuntura con nuevas inyecciones económicas.
El programa coyuntural aprobado por el Gobierno asciende a 32.000 millones de euros, si se incluyen las ayudas a las familias y la reducción de las cotizaciones al seguro de desempleo aprobadas ya en octubre.
Por lo demás, contempla incentivos fiscales y de fomento de empleo a las pymes y a las contrataciones doméstico en el sector de la pequeña construcción, como puedan trabajos de pintores o albañiles para reformas domésticas.
Pese a que Steinbrück siguió fiel a evitar todo tono optimista en el actual tiempo de incertidumbre económica, mantuvo las previsiones económicas elaboradas por el gobierno para el año próximo, según las que el Producto Interior Bruto (PIB) crecerá un 0,2%.
Teniendo en cuenta de que las previsiones de los analistas van desde un crecimiento del 0,2 hasta un retroceso del 1%, "es legítimo" utilizar el dato más positivo como base de cálculo, dijo el ministro.
El Bundesbank parte para 2009 de una contracción económica del 1%, lo que constituiría el mayor retroceso del PIB desde la fundación de la República Federal de Alemania en 1949.
Los presupuestos generales de 2009, que se someterán a la aprobación del parlamento el próximo viernes, contemplan un endeudamiento de 18.500 millones de euros, casi el doble de lo previsto inicialmente.
Tras realizar otras correcciones, los presupuestos alemanes para el año próximo suman finalmente 290.000 millones de euros, 1.600 millones de euros mas que los calculados en el borrador inicial del Gobierno germano.
Los presupuestos definitivos contemplan inversiones por valor de 27.200 millones de euros, 1.350 millones más que los calculados inicialmente.