Zapatero y Rajoy se reunirán mañana en el Congreso para abordar la cumbre financiera
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PP, Mariano Rajoy, se reunirán mañana a las 19.00 horas en el Congreso de los Diputados, para analizar la posición española ante la cumbre del día 15 en Washington, informaron a Europa Press fuentes de Moncloa y 'populares'.
Con su reunión con Rajoy, Zapatero completará la ronda de contactos que él mismo anunció el pasado sábado para "intercambiar posiciones y recibir sugerencias" ante la cumbre de Washington y que incluye a entidades financieras, agentes sociales y, finalmente, al líder de la oposición.
Con estas entrevistas, Zapatero pretende forjar una "posición de país" para la cumbre, en palabras del vicesecretario general de su partido, José Blanco. Rajoy, por su parte, anunció esta mañana que aprovechará para plantear al presidente un paquete de medidas similares a las que tomó el PP en 1996 para hacer frente a la "crisis de la economía real" de España, por entender que hasta ahora sólo se han aplicado "parches y remiendos milagreros".
El propio Zapatero adelantó a Rajoy su plan de celebrar esta ronda de contactos en una conversación telefónica el sábado por la mañana, pocas horas después de que la presidencia francesa de la UE anunciara oficialmente que España acudiría a la Cumbre de Washington en uno de los cinco puestos que la UE tiene en el G20 -junto a Francia, Reino Unido, Italia y Alemania-.
Zapatero y Rajoy han debido colocar su reunión en una semana con una agenda bastante apretada, a lo que se ha sumado el que ambos viajarán mañana por la mañana a Pontevedra para asistir al funeral por los dos militares fallecidos ayer en un ataque suicida en Afganistán.
Pleno presupuestario en el Congreso
Mañana por la tarde, ambos deberán estar en el Congreso, ya que a las 20.00 horas comenzarán las primeras votaciones del proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2009. Zapatero acudirá antes al pleno de control al Gobierno en el Senado.
La de mañana será la tercera reunión de Zapatero y Rajoy en esta legislatura, tras las mantenidas en Moncloa el 23 de julio, cuando llegaron a acuerdos en materia de lucha antiterrorista y renovación de los órganos judiciales, y el 14 de octubre, un encuentro que terminó con el anuncio de que los dos partidos crearán una mesa para impulsar reformas estructurales.
Banqueros, empresarios y sindicatos
La ronda de consultas para la cumbre de Washington comenzó esta misma mañana, cuando el jefe del Ejecutivo se reunió con los presidentes de las cuatro mayores entidades financieras españolas -Emilio Botín, del Santander; Francisco González, del BBVA; Isidre Fainé, de La Caixa, y Miguel Blesa, de Caja Madrid- y esta tarde está reunido con los secretarios generales de UGT y CCOO, Cándido Méndez y José María Fidalgo, respectivamente; y los presidentes de las patronales CEOE, Gerardo Díaz Ferrán; y CEPYME, Jesús Bárcenas.
Los presidentes de bancos y cajas trasladaron a Zapatero la necesidad de mayores controles y supervisión en el sistema financiero internacional. Zapatero ya adelantó el sábado que su posición en Washington será de exigir la máxima transparencia y el refuerzo de los controles del sistema financiero internacional.
Avanzó, además, que su objetivo es que la cumbre no se limite a reformas técnicas del sistema financiero, sino introducir además asuntos como la lucha contra la pobreza y contra el cambio climático.
Por su parte, Rajoy defenderá el "volver a los valores" del trabajo, del esfuerzo y de una economía productiva, "impedir prácticas como el excesivo apalancamiento financiero" o que se concedan "créditos ilimitados sobre recursos propios escasos", según explicó él mismo esta mañana.
Así, reclamará un programa de austeridad en las cuentas públicas, una rebaja al 20 por ciento del tipo impositivo del Impuesto de Sociedades a las pymes y libertad de amortización de las inversiones del inmovilizado en los dos próximos años para todas las empresas, así como un apoyo fiscal en el IVA y en el Impuesto de Sociedades para las empresas que tienen problemas de impagos.
En segundo lugar defenderá la urgencia de llevar a cabo reformas estructurales, como aumentar la independencia de los organismos reguladores, vigilar los precios mediante el aumento de la competencia y la liberalización de los mercados o garantizar la unidad de mercado. Además, planteará cambios en la política energética, educativa, I+D+i, laboral y de inmigración.