Alcanzar la cima mientras el mundo se derrumba
Neel Kashkari ha pasado del anonimato a dirigir el rescate de EE UU.
Minutos antes de su debut como director interino de la nueva Oficina de Estabilización Financiera -encargada de poner en marcha el plan de rescate financiero del Tesoro de Estados Unidos-, Neel Kashkari estaba tranquilamente sentado en el hall de un hotel en Washington, a salvo de ser reconocido por muchos de los banqueros que esperaban ansiosos oírle hablar. En el momento en que terminó el discurso de 21 minutos en el que desgranó los detalles del plan de 700.000 millones de dólares, una nube de cámaras y reporteros salió tras él.
En menos de dos semanas, y con sólo 35 años, este ex banquero de Goldman Sachs ha pasado de la oscuridad del anonimato al calor de los focos en el centro de la crisis financiera de EE UU. Se le ha dado extraordinaria libertad, y no mucho tiempo, para conducir una ofensiva que evite el hundimiento del mercado. 'Un programa tan amplio y complejo como éste normalmente llevaría meses, o incluso años, para ser preparado', dijo Kashkari en su discurso. 'Pero no tenemos ni meses ni años'.
Su nombramiento a principios de este mes suscitó los comentarios de los veteranos de Wall Street debido a su juventud, su relativa inexperiencia con los mercados y sus vínculos con Goldman Sachs, donde Henry Paulson, el director del Tesoro, había sido consejero delegado. 'Esencialmente, parece que están acudiendo a las instituciones financieras que condujeron al problema para resolverlo', critica Michael Greenberger, ex directivo de la Commodity Futures Trading Commission.
Kashkari, hijo de inmigrantes indios, creció en Ohio y recibió los títulos de Bachillerato e ingeniería en la Universidad de Illinois. Tiene un MBA por la escuela Wharton de la Universidad de Pensilvania y, antes de conseguir un trabajo en Wall Street, fue ingeniero aeronáutico, donde trabajó en el desarrollo tecnológico de las misiones de la NASA.
Luego empezó su labor en la oficina de Goldman Sachs en San Francisco, como encargado de las fusiones y adquisiciones de las empresas de tecnología de la información. En julio de 2006, se unió al Tesoro como consejero de Paulson, donde le asesoró en asuntos inmobiliarios e hipotecarios.
Sus días en su nuevo cargo, sin embargo, pueden estar contados, ante las inminentes elecciones presidenciales. Stan Collender, ex analista para los comités presupuestarios de la Cámara de Representantes y el Senado, afirma que Kashkari está bien preparado para el trabajo, pero que quien gane la presidencia querrá 'afrontar la crisis económica desde el día siguiente de las elecciones'. Paulson ha consultado con la Casa Blanca y con Barack Obama y John McCain para que el director de su plan sea un cargo permanente. Según dijo, espera que esta persona sea confirmada por el Estado, como la ley exige, 'tan pronto como sea posible'.
Una semana de actividad frenética
Neel Kashkari ha vivido probablemente la semana más intensa de su vida. Su nombramiento se hizo público el pasado lunes 6 de octubre, y desde entonces su nombre no ha dejado de aparecer en los periódicos y su cara se ha vuelto habitual en los telediarios. Bautizado por varios medios de comunicación estadounidenses como el zar del rescate, Kashkari protagonizó este lunes su primera comparecencia pública, en la que detalló el contenido del programa de 700.000 millones de dólares aprobado por Washington para devolver la estabilidad al sistema financiero. Ese día, ya adelantó la posibilidad, confirmada al día siguiente por el Gobierno de Bush, de emplear parte de ese dinero en adquirir acciones de las entidades bancarias. El Tesoro anunció que empleará 250.000 millones de dólares en nacionalizar parcialmente los bancos más afectados.