_
_
_
_
Aerolíneas

Lagunair cesa su actividad y deja bajo mínimos a cuatro aeropuertos de Castilla y León

La aerolínea regional Lagunair decidió ayer suspender sus actividades desde el 9 de octubre a causa de la crisis de pasajeros y de lo que considera 'una falta de cumplimiento de los compromisos por parte de la Junta de Castilla y León'.

La crisis aérea y el bloqueo en la recepción de las ayudas prometidas por la Junta de Castilla y León han terminado, al menos por el momento, con el vuelo corto de la compañía de aviación regional Lagunair.

El consejo de administración de la aerolínea, celebrado ayer en León, adoptó la decisión de dejar en tierra a partir del próximo 9 de octubre a los dos últimos aviones que mantenía en operación.

Fuentes del consejo indicaron que la situación de la aerolínea se ha vuelto insoportable por tres razones fundamentales. La primera, el encarecimiento de los precios del petróleo durante los últimos meses de 2007 y todo el primer semestre de al año actual.

La segunda causa es la profunda crisis de tráfico que sufren los vuelos domésticos en España. Por último, la puntilla ha sido lo que sus propietarios consideran un 'claro incumplimiento' por parte de la Junta de Castilla y León de los acuerdos de promoción con diversas instituciones locales. Dichos acuerdos permitían hacer rentables los vuelos de Lagunair en aeropuertos como los de León, Salamanca y Burgos, cuyo trafico de pasajeros es de muy baja densidad.

Los dueños de la empresa vinculados al grupo Agelco, así como otros accionistas de referencia como Caja España y Globalia, han venido reclamando que debe ser la Junta la que aporte los 12 millones de euros necesarios para que Lagunair pueda mantener sus operaciones desde los citados cuatro aeropuertos de la comunidad autónoma.

Competidor

Las fuentes citadas aseguraron que ahora los dueños se van a mantener expectantes para ver si la ayudas que a Lagunair se le niegan por parte de la administración autónoma le son concedidas a la otra compañía regional que mantiene vuelos en las terminales citadas. Sin nombrarla se refieren a la franquiciada de Iberia, Air Nostrum.

Los dueños de Lagunair cree que el gobierno de Castilla y León tendrá que explicar 'por qué deja caer una empresa de la región mientras que podría beneficiar a la de otra comunidad autónoma'.

La aerolínea inició sus vuelos en 2005 y en sus mejores momentos, a mediados de 2007, llegó a realizar hasta 128 vuelos a la semana con una flota de cinco aviones. Dos de ellos eran reactores Embraer de 50 plazas y los otros tres aparatos Saab de 33 asientos.

Los 150 trabajadores de la empresa realizaron ayer diferentes actos de protesta. El secretario general de Transportes de UGT en Castilla y León, Pedro Aller, exigió que la administración autónoma ofrezca una respuesta 'clara y contundente' de apoyo a la continuidad de la compañía Lagunair.

Terminales pequeñas y en franco retroceso

Los cuatro aeropuertos de Castilla y León se encuentran entre los últimos que ha adaptado AENA en el marco de una política de creación de terminales en zonas de muy baja densidad de tráfico.El aeródromo de Valladolid transportó entre enero y agosto 337.000 personas, con un descenso del 3,3% en relación al mismo período del año anterior. León tuvo 89.000 pasajeros, con una caída del 17,8%. Salamanca creció un 4% hasta 44.000 pasajeros. La terminal de Burgos, en sus tres meses de vida, hasta agosto tuvo 4.440 pasajeros.La presidenta de la Diputación de León y del Consorcio del Aeropuerto de León, Isabel Carrasco, aseguró ayer que sería 'lamentable' que se cerrara Lagunair. 'Hemos hecho lo posible e imposible por colaborar'.

Archivado En

_
_