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Hacia un nuevo orden financiero

El miedo a la recesión ahonda la caída de los índices bursátiles

El miedo a la recesión tomó ayer las riendas del mercado y empujó los índices a la baja. En Wall Street, el S&P 500 sufrió un recorte del 4,03%, arrastrado por General Electric. En Europa las pérdidas superaron el 1%. El Ibex cedió un 1,61%, hasta 11.002,3 puntos.

El pánico, por el momento, ha pasado a un segundo plano. Pero la preocupación está presente, y provoca un goteo incesante en las cotizaciones. La aprobación del plan anticrisis por parte del Senado de EE UU no ha dado aire a los mercados de valores, más que nada porque es un argumento que ya está en precio.

Ayer la economía volvió a un primer plano, a raíz de la publicación de una serie de indicadores negativos que ponen sobre la mesa que la situación económica de Estados Unidos es extremadamente delicada, incluso si se aprueba el plan del Tesoro.

Este es el escenario que reflejaba ayer Wall Street, que se vio arrastrado por un mal dato de peticiones de desempleo semanal y por el desplome de las peticiones de fábrica en agosto.

Las acciones de gigantes como el fabricante de maquinaria Caterpillar o el de aluminio, Alcoa, cayeron con fuerza, un 8% y un 9%, respectivamente, afectados por las perspectivas de un empeoramiento económico a nivel mundial.

En el caso de Alcoa, además, pesó la caída del precio de las materias primas, que ayer estaban al nivel más bajo del año, según el índice CRB que elabora Reuters.

El pesimismo contagio a los índices en su conjunto: El Nasdaq perdió un 4,48%, el S&P 500, un 4,03% y el Dow Jones, un 3,22%. Este indicador se vio lastrado, además, por la caída de General Electric (-9%), que ha vendido en el mercado 548,7 millones de acciones con un descuento del 9,2% con respecto al cierre del miércoles. La apertura bajista de Wall Street pesó en los índices europeos, ya de por sí decepcionados por la decisión del Banco Central Europeo de mantener los tipos en el 4,25%. Pese a todo, las Bolsas cotizaron al alza en previsión de una inminente rebaja de tipos, hasta la apertura del mercado estadounidense.

En España, el Ibex 35 logró mantener la cota de 11.000 euros, aunque cerró con un retroceso del 1,61%, hasta 11.002,3 puntos. Repsol (-5,52%), Telefónica (-0,7%) e Iberdrola (-2,59%) arrastraron al índice en su caída, aunque fueron las constructoras, Sacyr Vallehermoso (-7,10%) y Acciona (-8,26%) las que peor saldo arrojaron en la sesión junto a Técnicas Reunidas, que cedió un 8,32%.

La sesión se desarrolló con bastante volumen: se negociaron acciones por valor de 6.276 millones de euros en el mercado continuo, frente a una media diaria en el año, hasta el 31 de agosto, de 5.200 millones.

La fuerte caída de las materias primas, un 30% desde comienzos de julio, afectó al sector minero europeo, que retrocedió un 6,18% en la sesión. El abaratamiento de los materiales básicos es también una señal de la desaceleración económica a nivel global. El índice Dax de Fráncfort registró ayer la mayor caída de Europa, un 2,51%.

La jornada de hoy va a estar marcada por dos acontecimientos en EE UU: los datos de desempleo de septiembre y la votación del plan anticrisis en el Congreso, que tendrá lugar una vez hayan cerrado los mercados.

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