Londres obvia las reglas antimonopolio para facilitar la fusión Lloyds-Halifax
Lloyds TSB valora en 12.200 millones de libras (15.375 millones de euros) HBOS de cara a una fusión con intercambio de acciones. La unión del cuarto y el quinto banco británico dará lugar a un gigante con 140.000 trabajadores que será el primer grupo financiero en Reino Unido. El Gobierno de Gordon Brown no aplicará las reglas antimonopolio en aras de la estabilidad del sistema financiero.
Hoy es un hito en la historia de la industria financiera'. La frase, del consejero delegado de Lloyds TSB, Eric Daniels, da una idea de la repercusión que ha tenido en el Reino Unido la compra-rescate de Halifax Bank of Scotland (HBOS) por parte de Lloyds. La operación, que va a alcanzar un volumen de 12.200 millones de libras (15.375 millones de euros), fue hecha pública ayer, aunque el miércoles todo el sector la daba por cerrada.
De acuerdo con los cálculos realizados por Lloyds, con esta adquisición lograrán hasta 2010 sinergias por valor de 1.000 millones de libras (1.265 millones de euros) gracias a la eliminación de oficinas y a la supresión de puestos duplicados. Las entidades no informaron sobre qué proporción de los 140.000 empleados que conformarán parte de la plantilla del nuevo grupo perderán su trabajo. Según los cálculos de algunos analistas, hasta 40.000 personas podrían quedar en la calle, aunque Daniels consideró 'elevada' esta cifra.
El Gobierno británico ha considerado asumible este coste con tal de evitar un colapso como el que sufrió el banco Northern Rock y que acabó provocando su nacionalización. Tal es la importancia que el Ejecutivo de Gordon Brown ha dado a la operación, que ya ha anunciado que no aplicará las normas de defensa de la competencia. La 'estabilidad del sistema financiero británico' está en juego, según un alto cargo del ministerio de Economía, y 'el interés general' obliga a obviar las reglas antimonopolio que hace un año impidieron que Lloyds adquiriese Allliance & Leicester, una firma mucho más pequeña que HBOS y que, finalmente, ha acabado en manos del grupo Santander.
Los analistas cifran en 40.000 los empleos que van a destruirse
La combinación de ambas entidades dará lugar al primer grupo financiero de Reino Unido, con una posición de liderazgo en cuentas corrientes, hipotecas, depósitos y créditos. Normalmente, una operación que diera lugar a una entidad con semejante posición de dominio en el mercado sería contraria a la legislación británica antimonopolio. Aún así, Daniels considera que los consumidores estarán adecuadamente protegidos ante situaciones de abuso. La nueva entidad, para la que aún no se ha buscado nombre, estará controlada en un 56% por los accionistas de Lloyds y en un 44% por los de HBOS.
El primer ejecutivo de Lloyds insistió en que toda la negociación se ha desarrollado en estrictos términos comerciales, y en que no se ha tratado a un rescate encubierto apadrinado desde Downing Street. Según Daniels, los dos bancos han debatido muchas veces en los últimos años sobre una posible combinación, pero la verdadera negociación se ha producido 'en las últimas semanas'. También reconoció que las turbulencias financieras han catalizado la operación: 'era un momento único para llevarla a cabo'. Su homólogo en HBOS, Andy Hornby, reconoció que el desplome bursátil de los últimos días les ha preocupado mucho, pero que apenas ha habido fugas de clientes o retiradas de dinero.
LAS CLAVES
Una operación histórica
Complicaciones Las dificultades de Halifax para refinanciar su balance provocaron su derrumbe bursátil y precipitaron la compra por parte de Lloyds.
Gobierno El Ejecutivo de Gordon Brown no quería que se repitiera el episodio Northern Rock y ha facilitado la operación.
Nuevo jugador La suma de la potencia en hipotecas de Halifax con la veteranía de Lloyds, junto con sus 140.000 empleados va a dar lugar al banco con mayor presencia en Reino Unido.