Wall Street se desploma por la sacudida de la banca y marca mínimos de tres años
El rescate de AIG por la Reserva Federal no convenció a Wall Street, que se enfrentó además a unos malos datos en el sector de la construcción. En las tres últimas jornadas la Bolsa de Nueva York acumula una caída del 7,1%. Tras la quiebra de Lehman Brothers, los inversores temen más víctimas. Hoy el Dow Jones perdió otros 450 puntos.
Poco duró el mensaje de firmeza de Bernanke. El selectivo industral partirá mañana desde los 10.607 puntos tras dejarse hoy un 4,09%. El S&P 500 perdió in 4,74% y se queda a 44 puntos del 1.200. Pero las mayores caídas fueron esta vez para el Nasdaq 100. El selectivo tecnológico restó un 4,94%.
AIG se precipitó hoy un 45,87%. La nacionalización de la principal aseguradora estadounidense y el crédito de 85.000 millones de dólares de la Reserva Federal no ayudaron a su cotización. Y es que AIG pierde ya un 96% de su valor desde enero.
El sector financiero protagonizó otro día de fuertes caidas. JP Morgan perdió un 12,2% y Citi un 10,9%. Las acciones de Bank of America restaron, a su vez, un 7,95%.
Ninguno de los 35 valores del Dow pudo colocarse al lado de las ganancias. Ni siquiera las gigantes del petróleo que durante buena parte de la jornada celebraron la subida de más de cinco dólares del crudo Texas, que cerró por encima de los 96,8 dólares poniendo fin a dos sesiones de descensos. Exxon perdió un 1,5% y Chevron un 2,2%.
Morgan convence, pero se desploma
Si ayer le tocaba el turno a Goldman Sachs, hoy era el día de Morgan Stanley. El banco fundado en 1935 anunció un descenso del 41% de su beneficio en los primeros nueve meses de su ejercicio fiscal.
El resultado fue mejor de lo esperado, pero sus títulos se devaluaron un 24,2% después de de que la cadena de televisión CNBC asegurara que la entidad estudia buscar una fusión con otra institución financiera para no cometer el mismo error que Lehman Brothers.
Antes de la campanada de cierre, el rumor de que Morgan Stanley podría presentar la quiebra se hacía eco en el parqué neoyorquino, afectando a la cotización de otros bancos medianos. Wachovia y Sovereign cedieron respectivos 20,7% y 16,9%, mientras que las acciones de Goldman Sachs cerraron a 114,5 dólares al perder un 13,9% de su valor.